Módulos de salud no están preparados para asistir los casos de contagios por el paludismo en Venezuela.
El paludismo en Venezuela no da tregua con los habitantes del estado Bolívar, especialmente las zonas rurales, las más afectadas y propensas a la enfermedad, que se ha diseminada en algunos sectores urbanos de Ciudad Guayana.
La concejal del municipio Caroní en el estado Bolívar, Aida González, aseveró que pese a la gravedad de la crisis, el módulo de la parroquia Pozo Verde no recibe los suficientes insumos para atender la enorme cantidad de afectados por el paludismo en Venezuela.
“Mientras las autoridades regionales y municipales se enfrascan en quiénes serán los nuevos constituyentes, la malaria, también conocida como paludismo, campea en la parroquias rurales de Caroní, cobrando víctimas fatales”, expresó González.
“Esta es una enfermedad que mantiene en jaque la salud de los habitantes de las parroquias Vista al Sol, Pozo Verde y Yocoima, ante la falta de jornadas de fumigación, escasez de medicamentos y reactivos para la pruebas necesarias”, agregó la edil.
La situación se empeora con el sobreprecio de los fármacos, donde la reventa de medicamentos para la malaria llega a sobrepasar los 10 mil bolívares. González denunció la falta de atención de las autoridades municipales para dotar al centro de salud de los insumos necesarios, con el fin de atender las necesidades del pueblo.
“Invito al alcalde Tito Oviedo a dejar su pan y circo, y a trabajar en pro de las comunidades de Guayana, que tanto requieren la atención municipal y sus autoridades de gobierno para”, puntualizó.