La presidenta de Consecomercio, advierte que aunque el sector se apega a las normativas debido a la crisis de agua y luz, esperan respuesta del gobierno de Maduro en pro de soluciones reales.
La presidenta de Conscomercio, Cipriana Ramos, asegura que en Venezuela ya no hay ofertas en virtud de la crisis que atraviesa el país, signado por la falta de producción, escasez, una altísima inflación todo lo cual va de la mano de erráticas políticas económicas impuestas por el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
La dirigente gremial de gira por oriente, afirma que mientras el Gobierno nacional no entienda que las políticas económicas no son las adecuadas, será muy difícil que el país transite por caminos de recuperación en lo económico.
Advierte que ni siquiera la política de puertos que se ha instaurado está funcionando, mientras el cierre de la frontera ha perjudicado notablemente al sector comercial.
«A decir verdad, el Gobierno cerró la frontera legal, pero la ilegal que son los caminos verdes, permanece abierta», dijo, tras subrayar que esta medida y otras políticas aplicadas como los controles de precio por tiempo indefinido, han generado mayores distorsiones».
Entre esas distorsiones menciona la dependencia total a una economía de puertos, debido a que en el país no se produce lo más mínimo, mientras la población desespera en colas porque en Venezuela no hay ofertas de alimentos, medicinas, ni nada que se le parezca, mientras lo poco que existe se vende a precios exagerados porque la demanda es muy alta.
Basta de medidas equivocadas
La presidenta de Consecomercio advierte que frente a la realidad actual, el gobierno de Maduro no puede continuar dando largas a las soluciones, recalcando que la salida a problemas como la escasez, está en poner a producir el país.
«Si eso no se logra, vamos a seguir dependiendo de las importaciones y ha llegado el momento que el Ejecutivo dice que no le está entrando ni un dólar, entonces cómo vamos a continuar importando».
El sector comercio según explica, está operando con santamarías arriba, pero sin ofertas, porque no existe producción,a cambio, dijo, hay un gran estado de necesidad.
No tuvo prurito al afirmar que los empresarios y emprendedores del área están trabajando con compromiso, pero demandando al Gobierno la eliminación de los controles, los cuales asevera, son la causa de muchas de las graves distorsiones que se presentan en materia de precios.
«Nosotros nos comemos las naranjas pero sí tenemos que pasar la dentera», afirma, tras fustigar la decisión de declarar la Semana Santa como de júbilo no laborable, sin tomar en cuenta la situación de quienes aún operan contracorriente.
Ramos dijo que el sector comercial está dispuesto a hacer el llamado necesario, para el ahorro del agua que no tienen y de la electricidad que tampoco está disponible, pero acota que también es necesario que se diga cuál será el plan del Gobierno para paliar los efectos del fenómeno climático de El Niño y la crisis que padece el país en todo sentido.