upata aguaHidrobolívar prometió restituir el servicio de agua en Upata paulatinamente.

Son casi dos meses sin agua en Upata, población del municipio Piar en el estado Bolívar. Sus habitantes, como Leonor García, aseguran que en cada sector la situación es peor.

“En Los Rosos no llega el agua, y en Chiripión, menos que menos”.

La estatal hidrológica en el estado, Hidrobolívar, no da una respuesta concreta a los habitantes, solo se limita a notifica a través de la red social twitter que “están trabajando” por solucionar el problema. El jueves en la noche, prometieron restituir paulatinamente el servicio de agua en Upata, pero el problema parece no terminar.

Semana Santa sin agua

“La situación del agua en Upata sigue igual, trabajos y planes de contingencia en Chripón siguen sin dar los resultados esperados. Lo que es muy probable que pasemos Semana Santa sin agua».

«El gobierno sólo ha argumentado que el problema de la sequía se debe al fenómeno de El Niño, pero la realidad es que el motivo es la incorrecta administración de los parques térmicos e hidroeléctricos en los últimos 15 años y ausencia de acciones correctivas y de inversión”, denunció el concejal de Piar, Rafael Saavedra.

El edil de Upata reprochó además el presunto derroche y mal manejo de los recursos e inversiones destinados a los mantenimientos y obras para el servicio del agua en el municipio Piar. “Por deuda multimillonaria con empresa contratista, Hidrobolivar optó por instalar ellos mismos las balsas sin la adecuada experticia técnica, lo que hoy obligó a replantear trabajos, sometiendo a un pueblo a una continua falta de agua”, agregó Saavedra.

El concejal upatense califica, además, de hechos de corrupción lo que acontece con la baja en el nivel del embalse de Guri, refiriéndose a la falta de planes preventivos para enfrentes fenómenos climáticos, como El Niño, viéndose comprometido también el servicio de energía eléctrica.

“En los últimos años el embalse de Guri ha sido sobreexplotado, esto sumado a la corrupción y la indisponibilidad de inversiones en la generación térmica, lo que nos relata una crisis que se agudiza con el transcurrir de los años, perjudicando cada vez nuestra calidad de vida”, puntualizó Saavedra.