Comerse una arepa en la calle se ha convertido en un lujo porque se deben destinar dos días de trabajo para poder adquirirla.
Nada más tradicional en Venezuela que una arepa, pero el pan nuestro de cada día se hace menos accesible para los venezolanos que no encuentran la harina de maíz y no conforme con eso, su adquisición en una arepera implica casi dos días de trabajo para quien devengue el salario mínimo.
La arepa aguanta todo el relleno que el comensal quiera ponerle y las areperas, por tradición en Maracay, ofrecen gran variedad de sabores, cada uno pega más que otro al bolsillo, aunque se haga el sacrificio para consentir al paladar.
Hasta en 700 bolívares se puede pagar por una arepa en Maracay. Con los rellenos menos elaborados como el queso rallado, pueden adquirirse en 350 bolívares pero en el gusto de los comensales reina la carne mechada con queso amarillo, por lo que el comensal debe disponer entre 650 y 700 bolívares, dependiendo del local donde la adquiera. Nada fácil en estos tiempos de salario mínimo en Bs. 9.648, porque no es nada rentable trabajar dos días para poder comerse una arepa.
“Quisimos cambiar la rutina hoy y comer arepas fuera de casa, pero creo que en vez de una gracia nos salió una morisqueta, porque aquí se acabó eso de comerse dos arepas cada uno, de milagro una porque somos cuatro y con el jugo la cuenta nos dio más de 3 mil bolívares”, comentó Pedro Arteaga desde una de las areperas reconocidas a la entrada de Maracay.
Desde la famosa reina pepeada con su variante en crema de aguacate, atún, caraotas, salpicón de mariscos, salchichas, pollo, asado, huevos de codorniz, pernil, chicharronada, todas representan hoy por hoy una inversión cual restaurant. Se acabó aquello de considerar las areperas como un resuelve antes de concretar la comida fuerte del día.
La situación tampoco se presenta fácil para quienes consideraron en alguna oportunidad comercializar con arepas, pues hoy por hoy enfrentan la búsqueda de la harina de maíz, básico en la elaboración, que deben adquirir con sobreprecio. Aunque el paquete marca 19 bolívares, los comerciantes deben pagar hasta Bs. 200 para poder mantener el negocio.
Lo relacionado con las carnes y pollo también es tema que angustia a los propietarios de areperas, porque ambos productos están regulados pero no se consiguen sino con precios que rondan los 1250 y 1500 bolívares el kilo de carne de res mientras que el pollo deben adquirirlo en Bs. 850.
“Los proveedores todas las semanas suben los precios, aquí hay que guapear para mantener el precio de una arepa porque si se aumenta cada semana es menos gente la que viene a comer y de por si las ventas han disminuido en un 30 por ciento”, comentó Juan Ernesto López, encargadode un local en el centro de Maracay.
Según el encargado, muchos comensales no entienden que aparte del costo, cada arepa debe garantizar el mantenimiento del local comercial además del pago de los trabajadores.
“Ya esto no es como antes, aquí venía la gente a comerse dos arepas por persona, ahora se comen una y un jugo y ya son 800 bolívares”