El portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner, aseguró que los Estados Unidos, no apoyan la suspensión de Venezuela de la OEA, a pesar que consideran importantes, algunos puntos expuestos por el secretario general de la OEA, Luis Almagro, en el informe publicado la semana pasada, en el que pedía la suspensión de Venezuela del organismo si no convoca elecciones generales en 30 días. El vocero estadounidense precisó que comparte las preocupaciones sobre el estado de la democracia en Venezuela.
“No estamos impulsando la expulsión de Venezuela de la OEA en este momento. Sin embargo, sí pensamos que la OEA es el lugar adecuado para lidiar con la situación actual en Venezuela“, agregó.
El portavoz subrayó que las elecciones son esenciales para asegurar la rendición de cuentas en Venezuela, y urgió al Gobierno venezolano a cumplir con su Constitución. Aseguró que el presidente Nicolás Maduro debería permitir que la Asamblea Nacional elegida democráticamente cumpla sus funciones constitucionales, y además que consideró, que en el país petrolero se debe convocar elecciones lo antes posible. Toner, también llamó a la liberación inmediata de todos los presos políticos, incluido Leopoldo López.
Cabe mencionar que Maduro denunció que el Departamento de Estado presiona a los Gobiernos de América Latina y el Caribe, a través de sus embajadas, para que apoyen una “intervención global” en su país.
“El Departamento de Estado de EE.UU. tiene activados a todos sus embajadores en el mundo, particularmente en América Latina y el Caribe, presionando a todos los Gobiernos para que apoyen una intervención política, diplomática y una intervención global sobre Venezuela“, dijo el gobernante en una reunión con sus ministros transmitida por televisión.
Estados Unidos ha optado por unirse a otros 13 países miembros de la OEA para preparar una declaración que aumente la presión sobre Venezuela. Según confirmaron fuentes diplomáticas de cuatro misiones ante la OEA, la declaración “circula” entre 14 delegaciones que se reunieron para evaluar los pasos a dar y están ahora en negociaciones para convencer a cuatro países más de apoyar el texto.
El texto iría en el sentido de aumentar la presión sobre Caracas pidiéndole liberar políticos presos, confirmar que se celebrarán las elecciones regionales y generales previstas en el calendario y garantizar separación de poderes, según fuentes diplomáticas.