Más de 500 pasajeros están varados en el aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez porque suspenden vuelo de Conviasa “hasta que el presidente Maduro regrese de Cuba”.
El vuelo VCV3013 de Conviasa que cubre la ruta Madrid-Caracas fue suspendido la mañana de este 29 de noviembre, dejando a más de 500 pasajeros en tierra. La razón de que suspenden vuelo de Conviasa, según un agente de seguridad del aeropuerto, es que Venezuela cerró su espacio aéreo sin previo aviso y hasta nueva orden, mientras el presidente Nicolás Maduro se encuentre en Cuba rindiendo homenaje al fallecido líder de la revolución cubana, Fidel Castro.
El vuelo estaba previsto para las 9 y media de la mañana, y en un primer momento se anunció un retraso hasta las 12:00 del mediodía, que se convirtió en cancelación llegada la tarde.
Mientras las autoridades venezolanas mantenían su habitual hermetismo informativo, fuentes extraoficiales de AENA informaron que el vuelo de Conviasa fue suspendido por motivos de seguridad alegados por el gobierno venezolano ,y que la medida se mantendría mientras su Presidente estuviese fuera del país.
Las mismas fuentes informaron que el vuelo sería reprogramado tan pronto el gobierno venezolano abriera su espacio aéreo, previsiblemente el día 30 de noviembre, aunque no precisó la hora. Mientras tanto, los pasajeros de este vuelo de Conviasa y del resto de aerolíneas, no han podido entrar ni salir del país durante este inespecífico espacio de tiempo.
Retenidos en zona internacional
La situación es más grave, si cabe, para los venezolanos retenidos en la zona internacional del aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez; una veintena este 29 de noviembre. Se trata de unas diez personas que viajaban de Caracas a Madrid en el vuelo del domingo 27 y otras diez que llegaron en el mismo vuelo del día 29, a quienes se les impidió su ingreso a España por diferentes razones y estaban obligados a retornar al país en el mencionado vuelo cancelado.
Los vuelos de Conviasa que realizan la ruta Caracas-Madrid son considerados como “vuelos calientes” por las autoridades españolas, que miran con lupa a cada uno de sus pasajeros con nacionalidad venezolana, todos sospechosos de querer quedarse en situación irregular.
Aunque muchos cumplen con los requisitos que establece la ley, cualquier contradicción en su discurso puede desencadenar una denegación de entrada.
La suspensión de este vuelo de Conviasa es un ejemplo de la vulnerabilidad de los venezolanos que viajan a España, sobre todo en esta aerolínea, sujetos a cancelaciones imprevistas de sus vuelos y a que cualquier causa degenere en denegación de entrada y posterior calvario para regresar al país.