Precios de productos regulados bachaqueaosPara conocer los precios de los productos regulados que escasean en los supermercados sólo hay que visitar el mercado Las Pulgas de Maracaibo.

Los precios de los productos regulados ascienden día a día como el dólar. Pues ante la grave crisis económica que vive Venezuela y la intensa escasez de alimentos, producto de la inexistente producción debido a la falta de divisas y repuestos para maquinaria, lo poco que se consigue es atrapado por las mafias del bachaqueo y vendidas a precios descomunales e imposibles de pagar.

Recorrer los diferentes establecimientos comerciales se ha convertido en la rutina de muchos venezolanos quienes buscan ahorrar dinero, pero otros se dan por vencidos al no encontrar nada y recurren a las ventas ambulantes mejor conocidas en el Zulia como “mesitas de comida” para conseguir lo que tanto buscan, sin embargo, encontrar los productos sin hacer cola sale muy caro, pues los precios de los productos regulados son marcados como si fuesen el centro una subasta.

En esa actual guerra de quién da más, vive gran parte de los comerciantes del área informal del mercado Las Pulgas, ubicado en el casco histórico de la ciudad de Maracaibo.

Allí a pesar de las diferentes OLP que se han implementado y en las que los cuerpos de seguridad se han incautado de toneladas de productos, regulados en su gran mayoría, existe una gran cantidad de productos que de seguro le faltan en su casa y los necesita.

Desde papel sanitario, champú, salsa de tomate, mayonesa, jabones, comida para mascotas y hasta los extintos desodorantes son sólo parte de los adornos de estas mesas que se extienden a lo largo y ancho de este mercado con el consentimiento de los diferentes cuerpos de seguridad del estado Zulia.

Ante la situación elcorreodelorinco.com se trasladó a este popular mercado, para darle a conocer los precios de los productos regulados que venden los ya reconocidos nacionalmente como bachaqueros.

Precios de los productos regulados

A plena luz del día y sin temor al saqueo se ejecuta el delito de especulación. Si usted necesita comprar papel higiénico prepare su bolsillo, pues un paquete de cuatro unidades es vendido en 2 mil bolívares.

En el caso de los tan anhelados pañales, el paquete puede variar su costo dependiendo de la presentación y marca, el precio parte desde 4 mil bolívares, que es la cifra que piden como pago mínimo.

Seguidamente vienen los jabones de tocador, estos son vendidos por unidad, ya que es una estrategia comercial de estas mafias, para que el comprador se sienta más obligado a adquirirlo debido a su importancia en la higiene personal, el precio de cada uno puede ser de 300 a 500 bolívares, mientras que para tener el cabello desenredadito deberá pagar, dependiendo de la marca, hasta mil 500 bolívares por un champú.

El ya erradicado de la faz venezolana, desodorante, es un producto que no está sobre las mesas la mayoría del tiempo, pues destaca como el más escaso de todos los rubros, su precio puede variar de acuerdo a su presentación, uno de roll on puede costar hasta 2 mil 500 bolívares mientras que la presentación individual en papeleta 350 bolívares.

En el área de comida la mayonesa mediana tiene un costo de 800 bolívares, mientras que una salsa de tomate, también mediana, es vendida en 700 bolívares. Otro rubro que forma parte de la dieta diaria como lo es el arroz, apenas un kilo, es vendido en 600 bolívares, pero también está el azúcar con un costo de 800 bolívares.

Por otra parte, el tan demandado café que les da sentido a las mañanas, su costo es variante, pues su precio base se desprende de 2 mil bolívares por kilogramo. Y finalmente la comida para animales, un kilogramo de esta puede costar 2 mil 900 bolívares mientras que, en los establecimientos comerciales en mil bolívares, si es que la consigue, comparando el precio legar con el de los bachaqueros hay un margen de ganancia de 200%.

¿Ya sacó la cuenta? ¿Le alcanza? Seguro se preguntará porqué los cuerpos de seguridad no hacen nada al respecto, pues en la mal llamada “guerra económica” uno de los batallones está dormido.