La Semana Santa 2016 ha sido atípica para algunos venezolanos que han tenido que quedarse en Caracas haciendo colas para adquirir alimentos en vez de viajar a la playa, como es costumbre.
Luego de que el presidente Nicolás Maduro decretara como días no laborables lunes, martes y miércoles además del jueves y viernes de Semana Santa, para los venezolanos se convirtió en más días para hacer cola en la búsqueda de alimentos y productos básicos.
En Caracas, el escenario no era de calles vacías como suele ocurrir en los días de Semana Santa, sino de colas llenas de gente en las afueras de los supermercados.
«Ahora esto es lo que nos queda, qué playa ni qué playa. Hay que hacer cola para poder comer», reclama una señora en la avenida Andrés Bello en el centro de la ciudad. Estuvo más de 4 horas esperando bajo el sol para adquirir dos paquetes de harina de maíz.
Lo que sí se ve al igual que en las playas son las sombrillas. El inclemente sol de la temporada acompaña a los caraqueños en su viacrucis para adquirir productos. «Uno aquí se cala este calor, el sol. Hasta nos duelen las piernas y para nada porque a veces terminamos de hacer la cola y no conseguimos nada», denuncia María Fernández.
Aunque hay quienes rechazan la medida tomada por el primer mandatario nacional de decretar estos días de Semana Santa como no laborables, hay otros que lo agradecen: «Menos mal que por lo menos tenemos estos días libres. Así podemos hacer la cola con calma porque a veces nos toca faltar al trabajo y no es la idea. A mí ya me amenazaron de que me iban a botar», contó José Linares y fue abucheado por quienes se encontraban a su alrededor. Le gritaban «está bien que uno va a querer tener días libres para hacer cola. Ese serás tú».