A pesar de que aseguran que en los últimos dos años ha mejorado la seguridad en Terrazas del Ávila, el temor a ser secuestrados se mantiene latente.
Los vecinos de Terrazas del Ávila, una urbanización que limita con el barrio de Petare en el municipio Sucre de Caracas, temen a diario ser secuestrados a diario.
«Aquí eso es normal, sobre todo en la tarde. Cualquiera anda en su carro, entrando a su edificio, les llegan por sorpresa y los bajan para secuestrarlos».
Relató un habitante de la urbanización, quien dijo que han visto incluso a los delincuentes entrar a los apartamentos por las ventanas.
Explicó que aunque ha habido avances en las medidas de seguridad en la zona, no son suficientes. Hace dos años se instaló un sistema de alarmas que dejó de funcionar a los pocos meses de estar activo.
En la noche el riesgo aumenta, pues adicionalmente, por la cercanía con Petare, muchas veces se escuchan ráfagas de tiros y hasta ha habido accidentes con balas perdidas.
Daniela, una joven también habitante de Terrazas del Ávila, cuenta que en el apartamento donde vive hay una ventana con el vidrio roto producto de un impacto de bala que llegó desde la entrada de su conjunto residencial.
«Nosotros estábamos en la sala y desde la ventana se escucha para la parte de afuera del edificio; de repente escuchamos unos gritos, pero no entendíamos bien que estaba pasando. Cuando nos asomamos, nos dimos cuenta de que estaban secuestrando a una muchacha. A los pocos minutos escuchamos una detonación y resulta que fue un tiro al aire que lanzó el secuestrador», detalló.
La joven lamenta que los planes de seguridad que han promovido las autoridades locales y nacionales no tengan el efecto esperado por todos en la zona.