sambil maracaibo cerro por racionamiento de luzEl Sambil Maracaibo cerró indefinidamente tras ser sancionado por presuntamente incumplir medidas de ahorro eléctrico.

El cierre del Sambil Maracaibo es apenas la punta del iceberg de la gran tragedia de improductividad que se avecina para Venezuela, producto del racionamiento de luz que se aplica en el país debido a la crisis eléctrica.

El emblemático centro comercial Sambil Maracaibo, es punto de referencia en la entidad por brindar entre sus servicios: entidades bancarias, farmacias, ferreterías, restaurantes y hasta supermercados, pero, debió cerrar hasta nuevo aviso tras ser desconectados del sistema eléctrico por presuntamente superar el límite de distribución eléctrica.

De acuerdo a Juan Carlos Koch, gerente general de Sambil Maracaibo, operar con 900 KVA que es lo que se les exigía consumir es inviable para todas las labores y actividades que se presentan dentro de ese centro comercial.

“En definitiva, no nos pueden dar más de 900 KVA y por pasar hoy los 3 MVA nos desconectaron hasta nuevo aviso, a causa de la emergencia del Guri, en vista de esto, los locales de la feria de comida, deberán retirar su mercancía…, los centros comerciales no pueden autogenerarse, los equipos son de uso parcial, así que urge una revisión de las restricciones impuestas”, sentencia Koch.

Precisa además que, la energía suministrada sólo alcanza para prestar los servicios básicos, como los sistemas de agua y seguridad, lo que generaría que la infraestructura pueda ofrecer un competo servicio a los más de 20 mil visitantes que reciben diariamente.

«Esto atenta contra los 322 locales que operan en el centro comercial, los 2 mil 500 puestos de trabajo directos e indirectos y, por supuesto, nuestra función como centro de servicios para que los usuarios cobren sus quincenas», advierte Koch.

Días atrás más de mil trabajadores de Sambil Maracaibo, protestaron a las afueras de ese centro comercial en rechazo al racionamiento de luz que se le aplica al mismo y de las pérdidas que esta medida ha generado al comercio.

Quitarle el servicio eléctrico a un centro comercial se parece a lo que están viviendo algunas familias venezolanas cuando tienen que decidir a cuál de sus hijos no alimentar para que coman los demás.