Invertir en Venezuela genera un costo público muy importante, sobre todo por el tema de la inseguridad y las expropiaciones.
Por la situación política, económica y social, invertir en Venezuela representa un gran riesgo. Según el reporte Doingbusiness 2017 el país se encuentra en los últimos lugares para hacer negocios, ya que tanto el costo directo, como el de oportunidad, es caro.
Esto hace que la alternativa de emprender incluso sea más barata, ya que aunque el riesgo es alto, las ganancias también pueden serlo. Desde el punto de vista internacional invertir en Venezuela, es muy costoso en cuanto a los gastos intangibles y en los indirectos. Sin embargo, en los aspectos directos es muy barato.
Tal como reseña el director de Proemprendiemiento y profesor del IESA, Carlos Henrique Brandt, “los costos directos como el agua, la luz, el teléfono…hasta el pasaje y todo lo que tiene que ver con infraestructura, a pesar de que está destruida y que no funciona como uno quisiera, es muy económica y eso hace que invertir en Venezuela sea posible”.
Riegos de invertir en Venezuela
Tal como señala el gerente de Proyectos de Fedecámaras y co-fundador de Aprendiendo a Emprender, Jorge Jezerskas invertir en Venezuela es complicado y representa un costo público muy importante, debido a que “los costos intangibles como: inseguridad, alto riesgo jurídico, la inconformidad política, pública y notoria con las empresas privadas; sin nombrar el tema de las expropiaciones hacen que esta posibilidad sea cada vez más difícil”.
Además el tema inflacionario y las medidas económicas implementadas en los últimos 15 años por parte del Ejecutivo Nacional hacen que el hecho de invertir en Venezuela baje.
Para el presidente de Fedecámaras, Francisco Martínez en Venezuela “se está perdiendo el tejido empresarial y puestos de trabajo… y eso va a seguir alimentando el desabastecimiento y la inflación en el país, porque nadie quiere arriesgarse invirtiendo con un escenario tan complejo”.
¿Venezuela el país de las oportunidades?
No todo está perdido, tal como explica Brandt, Venezuela sigue siendo el país de las oportunidades, visto desde el punto de vista de lo que no hay, lo que hace falta y lo que puede diversificarse.
“ Los dos o tres sectores que mayor atención tienen por parte de emprendedores y empresarios es: alimentación (restaurantes, establecimientos de comida rápida), la estética, desarrollo turístico. Estos ámbitos hacen que el venezolano invierta en cosas básicas para obtener una ganancia transaccional es decir un toma y dame».
Asimismo, considera que el tema infraestructura es muy barato porque ya todo está hecho, solo hay que rescatarlo.