Una protesta en la frontera con Colombia mantiene cerrada las vías principales pues la población se cansó de las agresiones por parte de la FANB
La protesta en la frontera colombo-venezolana es protagonizada por vecinos de más de 30 comunidades y productores agropecuarios quienes mantienen bloqueada la vía Carrasquero-Guana.
La protesta en la frontera colombo-venezolana se debe a las presuntas agresiones y represión por parte de efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, adscritos al batallón José Antonio Páez, del sector El Escondido y quienes mantienen la búsqueda de un fusil que fue robado a un militar en el poblado de Guana, el pasado 21 de febrero.
Los manifestantes de la protesta en la frontera denuncian que los militares mantienen un exhaustivo control en la vía que comunica a La Guajira con la población de Monte Lara, y que además de eso, impiden el paso por el punto de control de Guana a quienes se dirigen a Maicao para hacer sus compras.
Michel Paz, representante de los comerciantes, indica que hay más de diez alcabalas en la zona y permiten el paso solo de quienes aparecen en una lista. Señala que esta situación mantiene sin alimentos y productos de aseo personal tanto a todas las familias que residen en la zona como a los comerciantes.
Ángel Andrade, otro de los protestantes y además ganadero calificó la medida como un atropello de los militares y asegura que a los productores agropecuarios se les impide pasar sus cosechas por la frontera colombiana. La protesta y el cierre de la vía se mantendrá hasta que se les permita el paso por Guana.
Es de recordar que la aplicación de medidas fuertes en la zona ha traído graves consecuencias en el pasado tal como ocurrió hace aproximadamente un año cuando, durante una OLP en La Guajira, un wayuü resultó muerto luego que el cuerpo castrense sorprendiera, en horas de la madrugada, a los residentes de la zona conocida como Molinete.
La OLP en La Guajira de ese entonces obedecía a que consiguieron un presunto surtidero clandestino de gasolina en esa zona. Pero el abuso de poder caldeó los ánimos de los afectados debido a que el procedimiento no fue nada sutil y violó la Ley Guajira, lo que generó un gran descontento entre los habitantes y estos se enfrentaron a los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana.