Los venezolanos pidieron además al Nazareno de San Pablo por la reconciliación del país este Miércoles Santo.

Este Miércoles Santo en Caracas se veneró, como es costumbre, la imagen del Nazareno de San Pablo vestido con su tradicional túnica morada con hilos de oro, la cruz de madera en la espalda y una corona de orquídeas que rodean su figura.

Fue vestido en el Teatro Municipal, lugar donde permaneció hasta el año 1880 en lo que fue la iglesia de San Pablo, derrumbada por el presidente Antonio Guzmán Blanco, quien más tarde, a petición de su esposa Ana Teresa, construyó la basílica de Santa Teresa en el centro de Caracas, donde es venerado el Nazareno.

Aunque la mayoría de los feligreses asiste a las misas del Miércoles Santo para pagar promesa por favores cumplidos, este año los caraqueños dejaron a un lado las aspiraciones personales para pedir por la reconstrucción y reconciliación del país. «Que el Nazareno le dé sabiduría a Nicolás Maduro», dijo una señora a la salida de la basílica de Santa Teresa. Confía en el Nazareno sus más grandes anhelos y este año la principal preocupación en su hogar es la crisis económica.

«¡Que se vaya Maduro!», respondió uno de los fieles al ser cuestionado sobre sus pedidos al Nazareno. Otra mujer lo respaldó: «estamos aquí orando para que se vaya», dijo haciendo referencia al primer mandatario nacional.

La inseguridad también fue un elemento que llamó la atención. Algunos feligreses prefirieron no asistir a la tradicional procesión del Nazareno por la hora. «A las 3 de la tarde cuando lo sacan ya la cosa se pone peligrosa», dijo. «Cuando uno regresa ya es de noche y por aquí no se puede andar tan tarde. Al hampa no le importa ni que sea Semana Santa ni que ande el Nazareno», lamentó.

Aunque hay otros que prefieren no mezclar la fe con la política, aseguran que es inevitable. «Ahorita nuestra mayor preocupación es el país. Eso es lo que le pedimos al Nazareno y a todos los santos; que hay soluciones, que la oposición y el gobierno trabajen juntos», expresó Juan Moreno, quien paga desde hace 15 años una promesa por salud.

Una niña de cinco años vistió a su muñeca con el gorro morado del Nazareno. Su madre explica que desde que nació le ha enseñado la importancia de la fe y la religión católica. «Siempre le explico que hay que creer en Dios, que hay que pedir con fuerza y este año ella misma pidió traerse su muñequita de morado como el Nazareno«.

Juan Da Silva cuenta a las afueras de la iglesia que pidió al Nazareno hace 10 años porque sufría de epilepsia. «Yo me curé gracia a él y por eso pagaré promesa de por vida», explica.

El cardenal Jorge Urosa Savino antes de oficiar la misa solemne en honor al Nazareno se refirió a la situación política del país y pidió a los dirigentes ocuparse de sus funciones. Lamentó la delincuencia a la que están a merced los venezolanos. «El gobierno está en la obligación de proteger la vida y el patrimonio de los venezolanos”, afirmó. Condenó también los recientes linchamientos que se han generado en la capital y dijo que son actos criminales.

“Las personas no saben cómo hacer para llevar la comida a sus hogares, el gobierno debe tomar las medidas necesarias para que cese la escasez.”, sostuvo y agregó que el pasado 6 de diciembre los venezolanos dieron una clara demostración de cuál es el rumbo que quieren para el país, por lo que Urosa pidió al Ejecutivo hacer caso a esta manifestación de la voluntad popular.

Se refirió también a la Asamblea Nacional y dijo que sus funciones deben ser respetadas como Poder Público Nacional legítimo.