La corrupción tiene su dia y hay que destacar el hecho de que aún siguen impunes en la región andina los casos más significativos de este flagelo
La corrupción va ganando la batalla. A propósito del Día Internacional contra la corrupción, los casos más significativos y recientes de corrupción en la región andina todavía continúan impunes.
Decretado así por la Organización de las Naciones Unidas desde el año 2003, todos los 9 de diciembre se celebra el Día Internacional contra la corrupción un llamado para resaltar el papel de todas aquellas personas e instituciones que desempeñan un papel en el combate y prevención de este flagelo.
Basta la revisión hemerográfica desde el año 2003 a la fecha, 13 años para ser exactos, que dan cuenta de importantes denuncias sobre hechos de corrupción en esta zona del país que no han llegado a nada.
Por mencionar algunos casos irresolutos se encuentran, en el estado Táchira, las denuncias sobre la corrupción y la pérdida de 40 millones de dólares en el proyecto de Pequiven para la instalación de una planta productora de fosfatos en San Joaquín de Navay.
Según los anuncios de la época, años 2003, esta planta debería estar operando a plena capacidad en el año 2011 con una producción de fosfatos y derivados capaz de atender los requerimientos del mercado nacional e internacional.
De esta planta, a la cual se le invirtieron los recursos antes mencionados, solamente queda un letrero en un terreno que luce abandonado y en donde hoy debería existir un gran complejo industrial al sur del estado Táchira.
No hay ningún responsable procesado por estos hechos.
Misión Café
El Plan Nacional del Café se convirtió en otro hecho de masiva corrupción. Desde el año 2004 Venezuela no exporta café y en la medida del tiempo ha pasado de ser exportador a un importador especialmente del grano desde Nicaragua en los últimos años.
La última exportación venezolana fue de 900 mil sacos.
El Plan nació oficialmente el 22 de febrero del 2005 dirigido al rescate de la caficultura nacional tal y como lo anunciaba el material promocional.
Los caficultores de los estados andinos fueron los supuestos beneficiarios de una gran inversión de recursos para la renovación de cafetales, compra de insumos, maquinaria, semilla y otros enseres.
Fedeagro ha denunciado que estos recursos llegaron a cuenta gota al campo y fueron pocos los productores beneficiarios de los mismos.
Si por los resultados nos vamos que un país ahora importe masivamente grano de menor calidad del que producía es un hecho significativo y que demuestra la pérdida y desviación
Tampoco hay personas investigadas o detenidas por esta pérdida patrimonial del Estado venezolano.
Cierre fronterizo
Hace un poco más de un año, el ex parlamentario tachirense Walter Márquez, denunció la existencia de una mafia militar que se lucraba con el cierre de la frontera colombo-venezolana.
Márquez indicó que esta organización tenía varios modus operandi en los cuales se beneficiaba del cobro de dinero a personas interesadas en pasar de lado y lado de la frontera mediante la entrega de permisos especiales de tránsito firmados por el comando de la Zona especial ubicada en el aeropuerto de San Antonio.
Adicional a esto el grupo uniformado mantendría vivo el contrabando. Tal y como lo reconocieron las autoridades colombianas a propósito del cierre, nunca antes se contrabandeó tantos productos como durante el cierre, por lo que las denuncias del exparlamentario procedían.
Lo cierto del caso es que la medida tomada por el Presidente Maduro y que mantuvo una vigencia de un año, sometió a los habitantes de frontera a estrictos controles.
Pero abrió también la brecha del enriquecimiento de algunos funcionarios militares quienes mantenían bajo su poder la llave de paso que controlaba el tránsito de personas desde y hasta Venezuela.
“Los militares, con la reapertura parcial, están acomodando sus fichas para seguir manejando el contrabando masivo y el único sancionado y castigado es el ciudadano de a pie que ve como le quitan lo poco que puede comprar”, afirmó un dirigente empresarial de San Antonio.
Estos casos son parte de centenares de denuncias sobre la corrupción en la región andina, con el lamentable saldo negativo y el desencanto por haber perdido una oportunidad histórica para el desarrollo.