Una obra de la gobernación del Táchira colapsó el barrio, 300 familias se vieron afectadas y 30 perdieron sus casas por completo hace casi 3 años porque los olvidaron.
Desde hace casi tres años, por todas las vías pidieron ayuda a la Gobernación del Táchira unas 300 familias, sus viviendas colapsaron debido a que una obra vial que realizaba la gobernación que dirige Vielma Mora cambió el cauce del río Torbes, que se desbocó y cargó con parte de las edificaciones del lugar; ante la falta de respuesta protestan frente a la Residencia de Gobernadores ahora, los afectados.
La respuesta ha sido nula de parte de la Gobernación del Táchira, de acuerdo al relato que hace Nelson Ruiz del barrio Eleazar López Contreras ubicado en la Troncal 5 de San Cristóbal, en el fronterizo estado Táchira.
“En el año 2013 más de 300 familias casi perdemos las casas por completo, luego de la extracción de arena que hizo el gobierno para construir el distribuidor de El Corozo, lo que hizo que el cauce del río Torbes cambiará y se llevó el muro de contención que contenía parte del barrio. Así se fueron casas y hasta la cancha deportiva”.
En esa oportunidad 300 familias fueron afectadas, pero perdieron sus viviendas por completo 30 familias quienes abandonaron el lugar, bajo la promesa del gobernador Vielma Mora de reubicarlos en viviendas aptas.
“De estás 30 familias sólo a reubicaron a cuatro, el resto tuvimos que hacer ranchos por ahí mismo o arrimarnos donde familia, pero ya ha pasado tanto tiempo que nos corrieron a muchos de donde estábamos porque las familias de nosotros también son pobres y tienen casas chiquitas. Y lo que vale un alquiler en este país sólo los muy, muy ricos pueden pagarlo y comprar una casa es algo que casi nadie puede hacer en Venezuela”, relata Ruiz.
Han solicitado en muchas ocasiones audiencias con el gobernador Vielma Mora y no logran que los atiendan, por esa razón prepararon pancartas y se llegaron hasta la Residencia Oficial de Gobernadores, dicen estar desesperados y ante la amenaza de la temporada de lluvias tienen mucho miedo de perder los ranchos que improvisaron y hasta la vida, relatan.
También perdieron el miedo
“Perdimos también el miedo a venir a protestar, lo hacemos pacíficamente como ven. Esperamos que nos atiendan y nos ayudan. Que no estamos pidiendo un favor es una obligación del gobierno, ellos nos dañaron el muro y las casas se cayeron por eso, les toca responder”.
Exigen se construya un nuevo muro de contención, construyan la cancha que se llevó el río Torbes y les faciliten materiales para la construcción que no se encuentran en el país y sólo los maneja el gobierno, como cemento, cabilla, entre otros. “Nosotros mismos ayudamos poniendo el trabajo, pero no tenemos cómo hacer nada”, expresó desesperado Nelson Ruiz.