Ciudadanos critican el nuevo sueldo mínimo a partir de este 1 de julio, en vista de la falta de control de precios.
“Con cada nuevo sueldo mínimo el presidente empeora la crisis en el país”. Así opina Tulio González, guayanés y vendedor informal. Se dedica a la venta de empanadas y pastelitos, y aunque sabe que hay gente que seguirá comprándole, no deja de temer por las bajas ventas y la subida de precio a la que se verá obligado, ya que todos los meses estos se incrementan.
Este domingo el presidente Nicolás Maduro dio un nuevo golpe con el nuevo sueldo mínimo, sin planes de control de precio y reducción del nivel inflacionario en Venezuela, lo cual hace nulo cualquier incremento de salario.
Con este tercer aumento en lo que va de 2017, el nuevo sueldo mínimo queda en 97 mil 531 bolívares, y la cestaticket a 17 unidades tributarias, quedando en 153 mil bolívares.
“Uno no puede alegrarse con ese aumento de sueldo, si antes de que aumentaran ya todo estaba caro y todos las semanas había un precio diferente en las cosas, ahora se pondrá peor, porque cuando intentan regular precios, desaparecen y lo consigues es bachaqueado, todo es una mafia”, opinó Carolina Jiménez.
Mala economía
El aumento de sueldo mínimo no solo preocupa por lo que incrementarán los precios de los alimentos, también los servicios y hasta las matrículas escolares.
“Ya pagué la inscripción y mensualidad del colegio, ahora me falta uniformes y útiles, eso sin contar con el aumento que seguro harán cuando comiencen las clases para poder pagar al personal. Venezuela no resiste más aumento de sueldo mínimo”, manifestó Irwing Ruíz, padre de una niña de seis años.
Para el economista Asdrúbal Oliveros, el nuevo sueldo mínimo implica mayor inflación, depresión del poder adquisitivo y desempleo, siendo las pequeñas y medianas empresas las más afectadas. Agrega que los constantes aumentos es un síntoma de la crisis económica en el país.