Todo transcurría pacíficamente durante la marcha al CNE hasta la llegada a la oficina regional en Guayana, donde un cordón militar impedía que los ciudadanos pasaran para la entrega del documento en el que exigen al ente electoral activar el referendo revocatorio. Uniformados terminaron por arremeter a jóvenes, hombres y mujeres con golpes y disparos al aire, hasta que finalmente lograron mediar con los diputados a la Asamblea Nacional para permitir el ingreso de representantes de la Mesa de la Unidad Democrática y aplacar los ánimos.
Las agresiones por parte de la Guardia Nacional Bolivariana dejaron tres personas heridas por golpes, uno de ellos Jorge Zambrano, un joven, al que hirieron en la cabeza y fue trasladado al hospital.
Representantes de la MUD en el estado Bolívar estuvieron presentes en la marcha al CNE, para exigir la continuidad de los próximos pasos para la activación del referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.
[youtube video=https://youtu.be/dSkZEbV4cHQ]El CNE ya debió haberse pronunciado en relación a la activación de centros para la validación de firmas y huellas de los electores que firmaron durante la etapa de recolección del 1% de firmas; sin embargo, a pesar de haber avanzada en la revisión de las mismas, el ente electoral se mantiene en silencio, presumiéndose que por ahora no se avanzará en los próximos pasos.
Durante la marcha al CNE, que inició desde el museo Jesús Soto en Ciudad Bolívar hasta la oficina regional de la referida institución, los electores calificaron como una falta de respeto la dilatación que mantiene el ente electoral para obedecer a la voluntad popular, atendiendo a un derecho constitucional contemplado en el artículo 72 de la Carta Magna.
«Cumplimos con la primera parte de la recolección de firmas, es más, le entregamos muchísimas más de las que necesitábamos, ya las revisaron, y los que firmamos estamos dispuestas a firmar una y mil veces más hasta lograr que se active el referendo revocatorio. ¿Cuál es el miedo del CNE y del gobierno?», reprochó Claudia Martínez, ama de casa.
Las consignas y mensajes durante la marcha al CNE se concentraron a su vez en la exigencia que hacen como ciudadanos por la crisis que vive el país, y no por un capricho. La mayoría de los argumentos coincidían en el rechazo por el alto índice de inseguridad en que se ha sumergido a todo el estado Bolívar, la escasez de alimentos y medicinas que cada día empeora, sin contar con la destrucción y quiebra de las empresas básicas.
«No solo es que estamos comiendo lo que se consigue y no lo que queremos, tenemos que pasar trabajo para conseguir un medicamento tan simple como unas pastillas ara dolor de cabeza, los niños no están viendo clases por el tema de la crisis eléctrica».
«En Puerto Ordaz prácticamente todos los semáforos están dañados, eso parece la selva, las empresas están quebradas, Corpoelec tiene un desastre con los cortes de luz programados, y todavía pretenden que signamos aguantando esta situación. ¿Cuántas razones más quieren para que entiendan que necesitamos un cambio de gobierno», manifestó Eduardo Medina, ingeniero.