Estrepitosamente, escandalosamente… el pasado mes de noviembre nos llamaba un colaborador en Comunicación de la líder de la oposición María Corina Machado. Su interés era conocer cómo es esto de El Correo del Orinoco.com, y le recibimos encantados. Pasaron los meses hasta enero, las prisas eran muchas, pero se perdieron los números de teléfono… apuntaron de aquella.
Hace unos días, y después de varios desencuentros, conseguimos cerrar una entrevista con la líder de la oposición, busqué un periodista con Fuerza y Fuego, y me cruce con Jesús Medina, le pedí que me ayudase en el pasaje por el día de Venezuela, pero Corina, María Corina Machado no llegó. El teléfono que nos habilitaron para hablar con ella estaba desconectado, y los de sus colaboradoras en Comunicación habían muerto, tanto los privados como los de trabajo. Curiosamente una hora después todos se conectaron y empezaron a funcionar. ¡Qué curioso!
Queda claro que después de este nuevo episodio, nuestro afán por hablar con la oposición y que nos cuenten qué quieren para los venezolanos queda lejos. Sus pretensiones son muy distintas a las que nuestros lectores exigen. Ellos quieren hablar de sus grandes cosas, los lectores de El Correo del Orinoco.com quieren que les digan dónde van a poder comprar sus medicinas, cómo se van a levantar mañana, quién les va a gobernar. La Oposición, con mayúsculas, es la que critica con trabajo y justifica una a una sus contestaciones. A Maduro, a sus secuaces, al sicario de Diosdado Cabello es muy fácil desmontarles el chiringuito, el problema es que es mejor una oposición atomizada, peleada, entre esas grandes familias que están en todos los lados –CASO LEDEZMA/IZARRA-, que una Oposición con una sola voz, que supiese qué es lo que añoran los venezolanos y que sepa colocar la proa de ese maravilloso trasatlántico que es Venezuela. Tierra de grandes seres humanos y de políticos rastreros e interesados. Si esta es la herencia del Descubrimiento, ¡Maldito Sea!
A seguir bien mis panas.
P.D. La excusa no fue otra que ante el asesinato ocurrido ayer en El Junquito, Corina se había dejado el móvil encima de la mesa y sólo ella lo puede contestar. ¡Ah! Y los celulares de las colaboradoras Claudia y Jenifer, estos también, o tampoco.