Los reiterados ataques por parte de la delincuencia a la Universidad de Oriente (UDO), deben ser motivo de reflexión para las autoridades de esa casa de estudios, a fin de estructurar un plan de seguridad que ponga fin a su desvalijamiento, sostiene Tirso González, delegado de la Asociación de Profesores de la Escuela de Ciencias Administrativas, ECA.
La indignación se deja ver entre los miembros de la comunidad de la UDO, quienes observan con impotencia la manera impune como delincuentes se apoderan de los pocos bienes que le quedan a la casa de estuduis, víctima de hurtos permanentes, pese al patrullaje diurno y nocturno que supuestamente se viene realizando desde hace dos semanas, tras acuerdo con el gobernador encargado, Nelson Moreno.
«Se trata de un problema de Estado y como tal debe ser atendido, porque todo cuanto existe en el recinto universitario pertenece al Estado venezolano y es responsabilidad de los Cuerpos de Seguridad preservarlos».
«Quien roba a la Universidad está atentando contra el Estado y debe ser castigado», asegura el directivo de la Asociación de Profesores de la UDO.
La estudiante Alejandra Chacón de la Escuela de Ciencias Administrativas, comenta que el ambiente es muy inseguro en la UDO y han comenzado a sentir miedo de estar en el recinto universitario.
«Los robos y hurtos se han convertido en una constante dentro de la Universidad que ya parece tierra de nadie, aquí la delincuencia hace estragos con la mayor tranquilidad y nada sucede, creo que eso sólo ocurre en este país»,
Delincuentes guapos y apoyados
De acuerdo con el testimonio de un estudiante de medicina que
«Grupos simpatizantes del Gobierno arremeten contra la UDO y son los mismos que saquean y amedrentan a estudiantes y profesores que piensan diferente, por eso nunca son atrapados y mucho menos castigados».
Entre los equipos que fueron hurtados, profesores y estudiantes denuncian el aire acondicionado de 5 toneladas, sustraído del edificio del Decanato, así como material de estudio, neveras, computadoras y herramientas de trabajo de la ECA, la cual se encuentra totalmente desvalijada.
Según advierte el personal docente, en la UDO la labor académica es cumplida por un alto nivel de compromiso y vocación de servicio, porque no existen las condiciones mínimas de higiene y seguridad laboral.