Acudir a la bomba de gasolina para surtir de combustible y esperar largas horas es costumbre y esta Semana Santa en Táchira las filas son enormes.
Semana Santa en cola es parte de lo que trae el periodo de vacaciones en Venezuela, especialmente en el Táchira, donde además de hacer cola para comprar alimentos y productos de primera necesidad volvieron las grandes filas de vehículos para poder surtir de combustible en la bomba de gasolina.
Las estaciones de servicio de San Cristóbal desde el fin de semana previo al asueto que decretó el presidente Nicolás Maduro, ya mostraron congestionamiento para quienes esperaban abastecer sus vehículos, a pesar de que la frontera sigue cerrada que era –la supuesta causa- que argumenta el Gobierno Nacional mantenía esa situación desde hace años atrás, en esta zona limítrofe de Venezuela con Colombia.
Se observó en un recorrido realizado por elcorreodelorinoco.com en la ciudad capital del Táchira, San Cristóbal que no todas la gasolineras estaba abiertas a inicios de semana y las que funcionaban por razones lógicas lucían abarrotadas.
La colectividad sale a surtir sus carros porque no se han pronunciado las autoridades sobre algún tipo de horario especial que regirá en el periodo de asueto y previendo una novedad o por motivos de viaje prefieren tener sus autos bien cargados.
La estación de servicio de la Unidad Vecinal ubicada en una zona popular de la ciudad estaba cerrada durante los primeros días de Semana Santa; en Barrio Obrero, territorio comercial, sólo dos bombas abrieron a inicios desde el lunes pero también lucían una cola de más de dos cuadras y había presencia policial en sus instalaciones. En la bomba ubicada en la avenida 19 de Abril, a la altura del antiguo Hotel Tamá también ocurría lo mismo, hubo despacho y filas esperando.
En la zona de la avenida Carabobo, otro punto de gran movimiento urbano también se observaron colas pero de menor dimensión, así como sucedía en la avenida Marginal.
En La Concordia, la bomba de gasolina ubicada frente al Gimnasio Cubierto tenía abiertas sus puertas y pasaban las dos cuadras la filas de vehículos que esperaban por abastecerse previo a la llegada del asueto de Semana Santa.
En el fronterizo estado del Táchira persisten las colas para surtir de combustible desde antes de la llegada de Semana Santa, y el asueto de los tachirenses no sólo se va en colas para comprar comida también de gasolina.