Los pueblos indígenas exigen que se abra la frontera colombo-venezolana pues aseguran que están comiendo basura
Bajo la consigna: “Tenemos hambre”, representantes de los pueblos indígenas del estado Zulia, exigen al gobernador de esa entidad, Francisco Arias Cárdenas, ordenar que se abra la frontera colombo-venezolana frontera colombo-venezolana tal como ha venido sucediendo en el Táchira.
Para los representantes el cierre, que arribará a un año, de la frontera colombo-venezolana en el Zulia, ha traído la desidia a las comunidades wayuü de La Guajira y Ureña, ya que estos se beneficiaban principalmente del comercio binacional.
“La mayoría de nuestros indígenas está comiendo de la basura, está comiendo de la calle y la ministra de Pueblos Indígenas y el gobernador están en silencio”.
“Tiene que hacerse libre y soberanamente, porque el Zulia y Uribía es un mismo territorio, es un territorio wayuü…, nosotros aspiramos que se abra la frontera y que se reactive el comercio binacional, que la gente que quiera ir a comprar productos en Maicao lo haga libremente”, sentencia Antonio Fernández, dirigente indígena del estado Zulia.
Denuncia que, como consecuencia del desabastecimiento que se vive en Venezuela, hay una gran cantidad de niños wayuü desnutridos en los hospitales de la región zuliana.
«¿Qué tienen nuestros niños? Nuestros niños están muriendo en los hospitales”
“Están llegando a los extremos sus niveles de salud, en tiempos normales nosotros tuvimos desnutrición, ahora imagínense qué es lo que tenemos», afirma Fernández.
A los indígenas no les llegan los CLAP
En virtud de los programas sociales que activa el gobierno nacional para paliar la situación alimentaria, exige que sean incluidos los pueblos indígenas en los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), por lo que solicitan la activación de los CLAP indígenas y para el oeste de Maracaibo.
“Queremos iniciar con 2 CLAP piloto, que se activarían principalmente en la parroquia Antonio Borjas Romero, barrio La Paz y en la parroquia Venancio Pulgar, barrio 12 de septiembre, para ello hemos ideado un formato de identificación mucho más fácil y accesible que le permita a los profesionales y técnicos que evalúan a los beneficiarios obtener de manera objetiva a las futuras personas que se estarán beneficiando”, propone Fernández.