Denuncian que militares prohíben transporte aéreo de alimentos hacia las zonas indígenas ubicadas en área del Arco Minero.
Las mafias por la exploración y explotación del Arco Minero del Orinoco causan efectos sobre los indígenas al sur del estado Bolívar. Desde este lunes se mantienen retenidos 15 militares de Luepa en la comunidad Araima Tepuy, a 74 kilómetros del municipio Sifontes, siendo acusados de extorsión.
De acuerdo con el diputado a la Asamblea Nacional, Américo De Grazia, los militares prohíben el transporte aéreo de alimentos hacia las zonas indígenas ubicadas en ámbito geográfico del Arco Minero del Orinoco.
Esta vez, lo que terminó por desencadenar la retención de los 15 militares fue la presunta extorsión de la que suelen ser objeto las comunidades indígenas.
Previo a este hecho, se conoció que los efectivos adscritos al Ejército habían tomado posesión de alimentos de otras comunidades, haciendo uso del maltrato y la humillación. Estos alertaron a los habitantes de Araima Tepuy, quienes tomaron acciones, comandadas por una de las líderes de esta comunidad.
Indígenas aseguraron que los uniformados están en perfectas condiciones de salud, siendo atendidos en la Casa Comunal del sector. A su vez, exigen la presencia de autoridades gubernamentales, en especial de los ministros de las áreas Indígenas y del Desarrollo Minero y Ecológico.
No es la primera vez que se da este tipo de situaciones en las zonas mineras del sur de Bolívar. En 2015, 10 militares fueron retenidos por el sector indígena del Alto Caura, municipio Sucre de Bolívar, también cansados de los abusos de los uniformados.
Para 2013, fueron 43 los militares detenidos y desarmados en Urimán. En aquel entonces la exigencia era la nulidad del Decreto 39.759, el cual otorga la exclusividad de la explotación de oro al Estado venezolano, que reserva la explotación del oro al Estado, respeto a las tierras indígenas y desmilitarizar la zona.