El presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, afirmó que el encargado de importar las cajas de comida del Clap, es el empresario Samark López, señalado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por tener lazos con personajes del narcotráfico, además de ser el presunto testaferro del vicepresidente de la República Tareck El Aissami. Borges señaló que existe un negocio turbio con la venta de las cajas de comida del Clap, situación que fue debatida en el seno del Parlamento Nacional.
“El diputado Carlos Paparoni demostró que a Venezuela le cuesta cada caja de Clap 8 dólares, y la venden después al Gobierno a 35 dólares, y después a los venezolanos, lo que debería costar 300 ‘bolos’ como mucho, porque el dólar (divisa protegida) es a 10 bolívares, se lo terminan vendiendo a los venezolanos a 15 mil, a 20 mil o hasta con sobreprecio”.
Borges aseguró que el responsable de hacer todo ese proceso antes señalado con las empresas y con las importaciones es Samark López. El parlamentario apuntó que existe un enorme proceso de corrupción con las cajas de comida del Clap, por un grupo de “indolentes” que se aprovechan del hambre de los venezolanos, al tiempo que indicó que la Asamblea Nacional ya inició las investigaciones sobre esos casos de corrupción.
“Cada hora que gasta un venezolano en una cola es porque el dinero del petróleo se lo robaron y por eso Venezuela hoy está sometida a este sistema de sumisión, de colas”, expresó Borges. Este martes 21 de febrero la Asamblea acordó remitir a la comisión que investiga al vicepresidente Tareck El Aissami un informe sobre su socio, el empresario venezolano Samark López.
Además el pasado 14 de febrero el Parlamento Nacional aprobó la creación de una Comisión Especial para investigar las acusaciones que realizó el Departamento del Tesoro de EEUU contra el vicepresidente de la República, Tareck El Aissami.