El silencio fue la respuesta ante la irregularidad registrada durante la noche de este lunes en el Centro de Atención al Detenido, Alayón, donde la explosión de dos granadas dejó como saldo la desinformación, porque desde el Gobierno de Aragua se ocultó el sangriento episodio tanto a representantes de los medios de comunicación, como a familiares de los reclusos.
Nuevamente la política del Gobierno de Tareck El Aissami, ex ministro del Interior y Justicia, fue no ofrecer detalles de los hechos que se registran en materia de sucesos en Aragua. El estallido de dos granadas en un recinto carcelario bajo custodia de PoliAragua, más de 20 heridos y aparentemente un solo fallecido, pareciera no ser motivo de importancia para informar a la población.
De nada vale la angustia de familiares que desde la madrugada de este martes comenzaron a llegar al Centro de Atención al Detenido para conocer del estado de salud de sus parientes privados de libertad, como tampoco vale la angustia de habitantes del sector Alayón quienes aseguran viven rezando.
“Con el Padre Nuestro en la boca porque no se sabe en qué momento hay una fuga y corre peligro la vida de nuestros hijos, hechos como las dos explosiones que se sintieron anoche (este lunes) pone en tensión a la comunidad y el despliegue policial ni siquiera deja dormir a los habitantes de Alayón”, denunció Luis Araque, quien habita en la localidad desde hace 22 años.
Además de que la angustia de familiares y habitantes de Alayón no es motivo que preocupe al Gobierno de Aragua, a la política de El Aissami tampoco le quita el sueño violar el derecho constitucional que tiene la ciudadanía a la información oportuna y veraz. No se ofreció información a la prensa, por lo que no existe versión fidedigna de los sucesos.
En la morgue del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de Caña de Azúcar, familiares de un supuesto único recluso fallecido en el Centro de Atención al Detenido no quisieron comentar sobre lo corrido.
De esta manera, el cerco comunicacional propicia la desinformación por cuanto el trabajo periodístico obligatoriamente debe basarse en versiones extraoficiales. Durante la mañana y desde el Centro de Atención al Detenido el oficial (PA) Olaizola, informó a la prensa que los detalles de lo ocurrido lo daría a conocer el comandante general del Cuerpo de Seguridad y Orden Público de la entidad, Eulises Farías Valderrama.Pasadas las 5:00 de la tarde no hubo convocatoria para rueda de prensa.
La situación se equipara con los sucesos ocurridos durante la tarde del lunes cuando dos hombres fueron abatidos en presunto enfrentamiento en el sector la Soledad de Maracay, tras perpetrar un supuesto robo.
Otras versiones indican que iban a secuestrar a una pareja cuando fueron sorprendidos por PoliAragua. Lo cierto es que dos fallecidos, el cierre de la avenida Sucre (Las Ballenas) que generó colapso por más de tres horas y tampoco hubo versión oficial.
“Nadie nos da respuesta”
Yésika Ochoa esperaba a las afueras de Alayón para conocer de
Marbella Martínez también aguardaba en las afueras. Dijo que su hermano resultó con heridas leves y logró hablar con él en el Hospital Central de Maracay.
“Mi hermano me dijo que operaron a siete que estaban graves, que fueron dos granadas que estallaron cuando él estaba en el puesto de trabajo del patio externo y que fue entre las 7:40 y las 8:00 de la noche”.
Versión oficial a casi 24 horas del hecho
Finalmente, a casi 24 horas del hecho, hubo pronunciamiento
La fuente oficial reveló que según las primeras investigaciones, dos sujetos desconocidos a bordo de una moto, arrojaron una granada al interior del recinto. El estallido dejó como saldo 21 detenidos heridos y un fallecido a causa de las esquirlas y respondía al nombre de José Edixon Gutiérrez Ceballos, privado de libertad por el delito de homicidio intencional calificado.
De los 21 lesionados, ocho quedaron bajo observación médica y el resto presentó heridas leves.