Gobierno de Aragua y alcaldías no concuerdan con la línea de “un solo gobierno” y cifras no cuadran.

El Gobierno de Aragua se enredó con las cifras oficiales de afectados por las lluvias caídas en la entidad desde la noche del martes, porque solo reportan 170 viviendas afectadas en todo el estado, pero boletines de prensa enviados por alcaldías bolivarianas no cuadran con las estadísticas ofrecidas por el despacho de Tareck El Aissami.

La implementación del silencio oficial sobre casos de importancia regional sigue siendo ley del Gobierno de Aragua y en el caso de las afectaciones por lluvias no hay excepción. Atrás, pero muy atrás quedó la competencia de Protección Civil en suministrar información a los medios de comunicación.

Un boletín de prensa suscrito por el Cnel. (GNB) Juan Ernesto Sulbarán Quintero, secretario sectorial de Prevención y Seguridad Ciudadana del Gobierno de Aragua, da cuenta que cuatro municipios en toda Aragua fueron afectados por las lluvias: Girardot, José Félix Ribas, Santiago Mariño y Francisco Linares Alcántara. En ellos solo se registró afectación de 170 viviendas, sin embargo, un boletín enviado por la alcaldía de Mariño señala que solo en esa jurisdicción 221 familias fueron víctimas de los estragos de las lluvias y luego en otra nota de prensa enviada por el Ministerio de Comunicación e Información, indica que Juan Carlos Sánchez, alcalde del municipio José Félix Ribas, informa que en la parroquia Zuata hubo 15 viviendas afectadas, cuatro de ellas con pérdida total de enseres. Las cuentas no cuadran.

El hecho es que información extraoficial señala que los sectores afectados por las lluvias en la entidad fueron Los Cocos, San Luis, Mata Redonda, Río Blanco I, La Punta y La Esmeralda, en el municipio Girardot; Magdaleno en el municipio Zamora, Las Américas, urbanización Las Delicias, Camburito y la avenida Alfaragua en Santa Rita, municipio Linares Alcántara; Caprotana, Guasimal y San Joaquín de Turmero en el municipio Mariño, así como Zuata, parroquia del municipio José Félix Ribas; además de varios sectores de Las Tejerías, municipio Santos Michelena.

El coronel Sulbarán Quintero señaló que en la entidad fue necesario el despliegue de 200 funcionarios de Protección Civil para atender a los afectados, durante la activación de un plan de contingencia. A la movilización se sumaron Bomberos de Aragua y Sistema de Emergencia 171-911.

Sólo en el municipio Mariño, el alcalde Alberto Mora dijo que se registraron 22 milímetros cúbicos de agua y que las 221 familias perdieron enseres por las anegaciones.

En la parroquia Zuata del municipio Ribas, el alcalde Juan Carlos Sánchez apuntó que los estragos de las lluvias fueron en el sector La Ceiba, tras desbordarse una quebrada.

Para la tarde del miércoles lograron el despeje total de la vía y de la quebrada, además de restablecer el servicio eléctrico en el circuito Bello Monte II, que se vio interrumpido por el fuerte torrencial que derribó varios árboles.

Falta de mantenimiento: causa de los estragos

La falta de mantenimiento de quebradas y cauces determinan a juicio de muchos afectados, la situación de emergencia que viven en cada temporada de lluvias.

Al sur de Maracay habitantes de Mata Redonda, urbanismo afectado por el Lago de Valencia, amanecieron prácticamente con el agua hasta el cuello. La situación es “común” con cada temporada de lluvias que deja aisladas a más de 300 familias que no pueden salir de sus viviendas hasta que baje el nivel de las aguas.

Isolina Cabrera y Génesis Machado, habitantes de la localidad, condenaron que la falta de mantenimiento los mantiene en zozobra cada vez que inician las lluvias y aunque el cuento se repite, lo que no se repite es la ayuda del Gobierno de Aragua.

 

Año tras año, en cada invierno los habitantes de Mata Redonda quedan presos hasta tres días en sus casas porque es imposible salir en vehículo y mucho menos a pie. Los niños no pueden ir al colegio y los adultos pierden el día de trabajo.

Cabrera señaló que no funcionaron las bombas de extracción de aguas del urbanismo que drenan todo el contenido al Lago de Valencia, porque a la contigencia se suma otro factor: falla la energía eléctrica.

“Menos mal por previsión tengo agua potable en mi casa y algo de alimentos para estos tres días que de seguro tardarán las aguas en bajar, pero… ¿cómo pueden hacer familias que no tienen abastecimiento porque el problema de la escasez de comida de milagro permite tener lo necesario y salir todos los días a buscar a ver qué se consigue luego de hacer interminables colas?”, preguntó la afectada.

Señaló que el Gobierno de Aragua dejó a la deriva a los habitantes de Mata Redonda, donde a pesar de que el TSJ ordenó la indemnización de las viviendas y el desalojo del urbanismo ante el peligro que representa el Lago de Valencia, muchas familias permanecen el lugar sin ningún tipo de atención.