La Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) hizo público si informe mensual, correspondiente al mes de enero de 2018, en el que indican que el sector comercial y productivo del Zulia inicia el año económicamente deprimido.
En el mismo, afirman que el estos sectores trabajan «a media máquina a causa del éxodo masivo de sus trabajadores y la ausencia de transporte público».
Alegan, que muchos comercios continúan cerrados porque no tienen mercancía, producto de la escasez de insumos, control cambiarios y desabastecimiento.
Sobre el sector agropecuarios, indican que está técnicamente paralizado por la escasez de lubricantes e insuguidad. «Los ganaderos zulianos temen por sus vidas, lo que complica el retorno de los productores del campo hacía sus fincas».
Según reportes del sector, se contabilizan un promedio de securestos en la zona que supera los 3 por día, sumado a los índices crecientes de asalto a mano armada.
En los comercios de la región se exhiben estantes vacíos, pasillos solitarios y anaqueles desnudos. Con golosinas, agua mineral, condimentos y envases plásticos se busca disimular la escasez de alimentos, que aumento desde las primeras semanas de enero cuando prohibieron por decreto regional la venta de productos regulados en los supermercados zulianos y que los precios deben mantenerse a los del 15 de diciembre.
La decisión de los organismos gubernamentales causa «pánico» y «dudas de cómo reponer inventarios si las reglas no están claras».