Los familiares de los Policías Metropolitanos sufren tanto como los detenidos al no conseguir alimentos ni medicinas.
En la actualidad son muy pocas las personas que aún hacen esfuerzos para apoyar, visitar y colaborar con los familiares de policías Metropolitanos que permanecen detenidos en la Cárcel de Ramo Verde, en Los Teques.
María Angélica Quintana, es una de las personas que desde hace más de 9 años visita constantemente ese recinto penitenciario para apoyar a los detenidos y a sus familiares.
Advierte que ahora es mucho más difícil ingresar a la cárcel que hace algunos años, cuando era posible llevarles alimentos, medicinas y libros sin mayores requisas que las estrictamente necesarias.
Socióloga de profesión, María Angélica intenta dar a conocer la crisis que en la actualidad viven los familiares de policías Metropolitanos detenidos.
“Cada historia de vida es un sufrimiento. Las esposas, las madres y los hijos se quedaron sin ingresos. Muchos con niños pequeños que fueron creciendo alrededor de la cárcel. Afortunadamente la mayoría ha estudiado, pero los familiares la están pasando muy mal”.
Explica que la búsqueda de alimentos para llevar a sus familiares detenidos es permanente, pero a esto se le suma lidiar con las enfermedades que muchos de ellos padecen y que sólo en los casos muy extremos, son atendidas por especialistas.
“Nadie sabe que hay madres y esposas que le dicen a uno para limpiar casas porque no tienen para comer. Eso es duro.”
Y es que se lo dicen además quien ya pasado los treinta años y decidió , como tanto otros venezolanos, buscar suerte en otros países por la crisis en la que vive el país, aunque finalmente regresó a su tierra.
“Yo me fui del país, quería algo distinto. Pero no fue fácil. Las oportunidades de trabajo son muy pocas, los papeles en regla es un trámite necesario y no quise pedir asilo porque sería estar presa fuera de mi país, así que regresé”.
Explica que ese regreso viene cargado de mas ganas por ayudar, aunque actualmente esta desempleada. “Yo sigo en contacto con las familias de los presos políticos que están en Ramo Verde. La gente no tiene idea de tantos presos que están allí, de los sufrimientos que tienen por las enfermedades y lo que les cuesta conseguir medicinas y comida. Antes la gente los ayudaba, ahora no se puede”.
Explica que en el caso de los policías Metropolitanos ya han cumplido mas de la mitad de la pena y aún así no reciben los beneficios de ley. “La cayapa judicial es una gran injusticia de la vida porque ves a los asesinos afuera y gente como ellos ( los Metropolitanos) que hicieron el bien al proteger a otros los ves presos.”
El caso del ex funcionario de la Policía Metropolitana, Luis Enrique Molina Cerrada (47ª) sentenciado a 30 años por los hechos de Abril de 2002, quien espera le otorguen el Beneficio de Medida Alternativa al Cumplimiento de la Pena que le corresponde por derecho y tiene vencido desde hace más de 5 años, es una demostración del sufrimiento de todos los Metropolitanos sentenciados por el régimen.