Luego que las llamas consumieran la vivienda de la familia Landazabal, en el municipio Junín del Táchira, porque los bomberos no pudieron cruzar a falta de un puente que los conecte con la carretera, hoy claman al gobierno construya el pasadero.
La vivienda de la familia Landazabal se quemó. Hicieron llamado de auxilio y los bomberos llegaron, pero no pudieron pasar hasta el siniestro porque no hay puente que una a la comunidad con la carretera. Tienen 35 años esperando les construyan un puente, pero ningún gobierno les ha brindado atención a estas 350 familias del sector Brisas de El Pinar, en la vía hacia Rubio, municipio Junín.
Los funcionarios del Cuerpo de Bomberos se hicieron presentes en el punto del siniestro una vez les hicieron el llamado, pero fue horas después cuando lograron cruzar por la quebrada La Zorquera que conecta con Brisas de El Pinar , pero ya las llamas habían consumado la casa y los enseres donde habitaba Leonor Landazabal con sus cinco hijos, de acuerdo al relato de su vecina Carmen Luna .
Luna comentó que lamentaron mucho no poder lograr la ayuda a tiempo, porque la familia Landazabal perdió todo lo que tenían, felizmente no hubo daños humanos.
“La señora Leonor estaba sola en la casa con su hija de 11 años, los otros niños se habían ido donde un familiar, y su esposo estaba de guardia porque trabaja como vigilante. Ella salió corriendo y no le dio tiempo ni de salvar su teléfono. Perdieron todo”.
“El gobernador no contesta”
Carmen Luna integrante del Consejo Comunal de El Pinar, dice que en repetidas ocasiones invitaron al gobernador del Táchira José Gregorio Vielma Mora a que los visitará y pudiera constatar la forma en que viven la familias del sector, pero aún no ha asistido:“Ojalá el gobernador mirara con ojos de bondad esta zona, le hemos mandado muchos oficios, también otro montón para Caimta (organismo del gobierno) buscando realicen el puente”.
“Somos casi 2.000 personas con ese problema. Más de 350 niños que van a la escuela o cruzan el puentecito que hicimos de retazos y que se mueve y casi se caen porque todo es improvisado. A veces los niños pasan por la quebrada y se embarran, se caen y deben regresarse a su casa sin ir a la escuela”.