Para comprar arroz en un abasto ubicado en la calle Maneiro, en Puerto La Cruz, decenas de personas hicieron largas colas por varias horas. Consultados se quejaron por la escasez y expresaron su descontento.
Apenas se enteró de que estaban vendiendo arroz en el abasto, la señora Karlys Granados dejó de lavar en su casa y salió corriendo a la calle Maneiro de Puerto La Cruz. En el local vendían solo dos kilos por persona. El kilo de arroz, con sabor a ajo, fue vendido a Bs. 135 en un abasto asiático, ubicado en la mencionada arteria vial del municipio Juan Antonio Sotillo.
Al igual que ella, otras decenas de personas soportaron sol y empujones para llevar algo de comer para su hogar, pues la escasez se agudiza con el pasar de los días.
«Yo no sé quién tiene la culpa de la escasez, pero estoy bien descontenta con esta situación. No quiero seguir perdiendo mi tiempo en estas colas», dijo visiblemente molesta la mujer, quien estaba acompañada de su pequeña hija, de 4 años de edad.
Detrás de ella se encontraba Manuel Marín, un obrero de 33 años de edad, quien responsabilizó al Gobierno nacional, encabezado por el presidente Nicolás Maduro, de las «desgracias que aquí en Venezuela ocurren a diario».
«No me queda de otra. A nadie le gusta hacer estas colas, pero no tengo arroz en mi casa y tengo que llevar par de kilos de la marca que sea», comentó el humilde trabajador, que sudaba por culpa del inclemente sol.
A las afueras del establecimiento los ánimos se caldearon poco a poco. Entre gritos y empujones, la Policía de Sotillo (Polisotillo) llegó a poner orden.