consejos comunalesLos consejos comunales se quedaron sin casa y sin dinero porque les prometieron un complejo urbanístico que nunca se construyó.

Miembros de los consejos comunales de la parroquia Francisco Eugenio Bustamante, al oeste de Maracaibo, no concilian el sueño desde hace ocho años atrás, pues vendieron absolutamente todo para que les construyeran un complejo urbanístico y aseguran que fueron estafados porque nunca obtuvieron sus casas y perdieron el dinero.

Los demandantes aseveran que la contratista Fundapueblo, a cargo de Roberto Suárez, exdiputado chavista del Zulia, les ofreció construir el complejo urbanístico Brisas del Zulia sobre 40 hectáreas en uno de los hatos en los que residían estos consejos comunales. La promesa era edificar 38 viviendas y estos accedieron, ya que manifestaron que veían el proyecto como la solución a sus problemas habitacionales, además de la oportunidad de tener una vivienda digna, vendieron gran parte de todo lo que poseían, desalojaron sus tierras, entregaron Bs. 1.720 millones a la contratista y comenzó su calvario.

Jhonny Meléndez, uno de los afectados, aseveró que vivía de loconsejos comunales que sembraba en el hato, pues poseía alrededor de tres hectáreas productivas.

“Tenía mis tierras, en ellas cultivábamos yuca, plátano, topocho. Llegó esta fundación y nos ofreció este proyecto, nos sacaron de los terrenos y ahora vivimos arrimados, lo que hizo fue perjudicarnos porque nunca construyeron nada”.

Paradójicamente el Ministerio de Ambiente emanó un decreto en el que se señalan que estos terrenos no son aptos para la construcción de viviendas y actualmente se encuentran en total abandono.

“El terreno está sin capa vegetal, ahora son utilizados para enfriar carros robados y para botar basura…, Vivo en otro terreno que tuve que comprar, porque sólo recibimos Bs. 10 mil que los utilizábamos para pagar el alquiler”, aseveró Meléndez.

Tras ocho años, el representante de la empresa Fundapueblo apareció, pero amenazando a estos ciudadanos con no construir las viviendas si llegan a denunciarlo, aunque según los afectados han perdido todas las esperanzas.

“Por denunciar dicen que no nos van a dar las casas y, de verdad las consejos comunalesnecesitamos, tengo niños enfermos, hay prioridad, queremos que nos tomen en cuenta, estamos allá marginados, pasa de todo y nadie hace nada, no nos vamos a quedar callados por miedo”, manifestó Maite Castillo, otra de las víctimas de la estafa.

Agregaron que durante todos estos años los representantes de la empresa sólo han convocado a reuniones y, sin embargo, aún no obtienen ninguna respuesta concreta. Aseveraron que a diario ven sacar materiales de construcción de uno de los galpones de la empresa en la zona.

Aseguraron que irán hasta la fiscalía para denunciar formalmente a Roberto Suárez, pues quieren una solución a las penurias por la que hoy atraviesan; confesaron temer por sus vidas tras la denuncia.