Estudiantes de la UCV protestaron para exigir que entreguen recursos que permitan el funcionamiento de esta casa de estudios.
La crisis económica en Venezuela ha invadido todos los rincones, incluso los de las casas de estudio del país. Los estudiantes de la Universidad Central de Venezuela advirtieron este jueves que el presupuesto de 2016 ya se agotó, por lo que en cualquier momento podría venir un cierre técnico.
«La universidad se nos está cayendo», exclamó Polea Manfudi, estudiante de Estudios Internacionales en la UCV.
Otro de los jóvenes reclamó por la falta de servicios. «No nos están dando comida de calidad». El comedor de la universidad no se encuentra en funcionamiento y los estudiantes de bajos recursos se ven severamente afectados.
«Hay algunos que se valían del comedor para poder desa
yunar y almorzar, ahora no tienen nada», contaron.
No es la primera vez que realizan denuncias y actividades de este tipo. A pesar de ser la primera universidad del país, no ha habido suficiente atención a los problemas que presenta.
Incluso desde la Asamblea Nacional se ha querido tomar cartas en el asunto. Una comisión especial se instaló para mediar y concretar alguna salida a la crisis. Sin embargo, la situación se mantiene.
La falta de recursos se evidencia en las fallas en la infraestructura, sobre todo en los laboratorios; falta de hojas, marcadores y demás artículos de oficinas necesarios para operar en lo académico. Tampoco hay comida en el comedor ni funcionarios de seguridad que resguarden el recinto. Los ascensores no sirven, los pupitres están rotos y a veces hasta hay problemas con el servicio de agua y luz.
Los representantes estudiantiles fueron enfáticos en que la salida de la crisis pasa por un cambio de gobierno. «Vamos a revocar este gobierno y a estos ministros», afirmó Hilda Rubí González, secretaria general de la Federación de Centros Universitarios de la UCV.