Los ciudadanos aseguran que comer huevos es la única salida que han encontrado ante la escasez en Venezuela y los altos precios de la carne y el pollo.
La escasez en Venezuela ha afectado la dieta de los ciudadanos que luchan a diario por mantener una alimentación acorde y balanceada. Ante los altos precios de la carne y el pollo, algunos han optado por comer huevo como proteína principal en sus comidas.
Sin embargo, conseguir este alimento tampoco es tarea fácil. Quienes quieren comer huevos hacen largas colas y pagan también altos precios. Luego de que el gobierno nacional decidiera bajar arbitrariamente el precio del cartón de 800 bolívares a 400, este alimento desapareció de los anaqueles.
«Uno ya no sabe qué comer. Con los huevos se resuelve mucho; el desayuno y la cena sobre todo y es una comida buena, tiene proteína. El problema es que a veces tampoco se consigue. A ningún precio», afirmó una señora consultada en un automercado caraqueño.
Aunque aún se puede hallar un cartón en 400 bolívares, no es lo más común. Los productores indican que vendiendo a este precio las pérdidas son irrecuperables. Cuando en un supermercado llegan los huevos inmediatamente aparecen las colas de gente sin importar que el precio sea el doble o incluso el triple del regulado.
«Aquí a la gente lo que le interesa es tener algo qué comer. Yo creo que ya no importa el precio. La gente consigue la plata porque sabe que mañana o no va a haber o va a estar más caro», comentó la encargada de un supermercado en La Campiña en Caracas.
Otra persona consultada en una cola para comprar huevos señaló que a pesar de que no están «baratos» a Bs. 700 sigue siendo mucho menos costoso que un kilo de carne o de pollo. «Esta era antes la comida de los que menos tenían y ahora mira cómo estamos. Todos nos peleamos por agarrar lo que haya y en las cantidades que nos dejen», lamentó.