Los laboratorios clínicos iniciaron el año sufriendo la escasez de reactivos al no tener inventario para efectuar las pruebas de diagnóstico.
La Asociación Venezolana de Importadores y Distribuidores de Equipos de Laboratorios y Afines reportó que la escasez de reactivos se situó en 97% al cierre de enero debido a que el Gobierno no les liquida divisas desde octubre del año pasado. Rafael Méndez, vicepresidente del gremio, aseguró que la situación es grave porque “falta de todo y sin diagnósticos no hay prescripción”.
Explicó que durante el 2016 el Gobierno liquidó 34 millones de dólares a los importadores y distribuidores de insumos de laboratorios, lo que representa 15% de las divisas requeridas por el sector y el monto más bajo desde 2013, cuando les entregaron aproximadamente 240 millones de dólares.
Por su parte, Carlos Canelón presidente de esa asociación, señaló que desconocen cuándo los proveedores internacionales les podrán reanudar los despachos, porque las autorizaciones de divisas realizadas por el Gobierno vencieron el 15 de enero sin ser liquidadas.
“En agosto les liquidaron 2,5 millones de dólares y en octubre 4 millones, montos que no cubren ni 10% de la deuda. Los proveedores están cada vez más reacios y dijeron que no despacharán a menos que paguen por adelantado”, informó Canelón.
Añadió que las líneas de crédito se las cerraron en vista de que mantienen una deuda de 71 millones de dólares que no han podido honrar. Precisó que por la escasez de reactivos los bioanalístas han tenido que retroceder a métodos manuales y técnicas en desuso, lo que ha generado que se retrasen las entregas de resultados y se pierda la inmediatez. Apuntó que resultados que se entregaban el día siguiente de efectuada la prueba ahora se hace entre 5 y 7 días.
Otra de las consecuencias del déficit de inventario es el alza de precio de las pruebas, que va entre 83% y 192%. El perfil hormonal femenino pasó de 25 mil bolívares que costaba en diciembre a 45 mil bolívares este mes: un repunte de 80%; el preoperatorio subió de 12 mil a 22 mil bolívares, un incremento de 83,3%, un perfil 20 varió de 9 mil a 18 mil 500 bolívares, aumentando 106% más.
Además, el perfil tiroideo subió de 13 mil a 29 mil 500 bolívares, 127% de aumento; mientras que una hematología paso de 1 mil 200 a 3 mil 500 bolívares, incrementando 192% en dos meses, también exámenes como el HIV o VDRL son 160% y 133,3% más costosos y además las muy demandadas pruebas de embarazo experimentaron un alza de 133% y el prenatal 85%.
Virginia Núñez, publicista, contó que para realizarle los exámenes preoperatorios a su madre hospitalizada con fractura de fémur, tuvo que recorrer cuatro laboratorios porque no disponían de todos los insumos para hacerlos. Las expectativas de Asodilab para este año se centran en hacer lobby para conocer a la nueva ministra de Salud, Antonieta Caporale, y su equipo de trabajo con el propósito de explicarles la situación y las prioridades, con el propósito de ayudar a mermar la Crisis humanitaria y de salud que existe en el país.
Oportunidad para la informalidad
Gerentes de varios laboratorios señalaron que han aparecido nuevos actores en la cadena de comercialización que les ofrecen de manera informal reactivos e insumos, pero a precios muy elevados. Miguel Castillo, bionalista y gerente de KMC Laboratorio Clínico, contó que acostumbraba a comprar los materiales para todo el año, pero en 2017 no lo pudo hacer porque no había inventario y lo que encontró costaba 4 veces más caro que en 2016.
Indicó que los proveedores de reactivos e insumos les vendían los productos con créditos pagaderos a 15 días, pero ahora les exigen la cancelación al hacer el pedido para mantenerles el precio. Para poder seguir realizando los exámenes, algunos laboratorios han adquirido productos de marcas no tradicionales a los vendedores informales, y en ocasiones se han encontrado con artículos vencidos u otros que no cumplen los estándares y protocolos reglamentarios.