La embajadora estadounidense ante las Naciones Unidas, Nikki Haley, habló sobre la crisis venezolana en el desarrollo de la 48 Conferencia de las Américas, celebrada en Washington, afirmando que es uno de los asuntos más importante para el gobierno de Donald Trump.
Durante su alocución, destacó que es hora de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, “se vaya” del poder por el bien de “la seguridad y la estabilidad del continente”.
“Hoy el régimen de Maduro amenaza la paz y la seguridad de la región entera. Lo que ha sido descrito como el desplazamiento mayor de la historia de la región está teniendo lugar ahora en Latinoamérica”, aseveró la embajadora.
Detalló que la crisis en el país ha obligado a miles de venezolanos a buscar una mejor calidad de vida en otras naciones.
“La gente desesperada está siendo recibida en sus países vecinos, pero están agotando los recursos del Estado y de las ciudades en Colombia, Brasil, Perú y otros lugares”, dijo Haley.
La embajadora concluyó reiterando al gobierno de Maduro que EEUU tiene intenciones de colaborar con el país y exhortó al jefe de Estado aceptar la ayuda humanitaria, petición a la que hace mención miles de personas durante las protestas antigubernamentales que se desarrollan a diario en el interior del país.