Obras a medio construir, irregularidades administrativas y mafias petroleras serán algunos de los casos que investigan diputados de la MUD en la entidad oriental.
Durante los últimos meses, el estado Anzoátegui se ha convertido en un reducto de casos de corrupción, es por ello que los representantes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en dicho estado, trabajan en la recopilación de pruebas para llevar al parlamento nacional los casos que deben ser investigados.
“Nosotros no perdemos el tiempo con situaciones impropias. La MUD sigue para adelante investigando aquellos casos de corrupción, que bastantes hay en este gobierno. Casos puntuales a investigar el cartel petrolero, destrozaron toda la industria petrolera” refiere Carlos Andrés Michelangeli diputado de la MUD por el estado.
Asimismo, los parlamentarios opositores se encuentran tras la pista de la entrega de terrenos en Barcelona para ciertas obras que no pasaron por la Cámara Municipal y la planta de soya ubicada en la zona sur de la entidad, la cual no ha estado en funcionamiento.
“En la planta de soya se gastaron más de seis mil millones de dólares y en los actuales momentos, no hay producción ni de un vaso de leche de soya y mucho menos de alimentos para animales que también se procesarían allí”.
Acción desestimada
Michelangeli le resta importancia a la denuncia interpuesta por el Gobernador del estado Anzoátegui, Nelson Moreno al presidente de la AN Henry Ramos Allup, por instigación a delinquir tras los actos violentos ocurridos en la entidad.
“Desde su época de parlamentario regional, Nelson Moreno siempre ha hecho denuncias sin fundamento. Lo que ocurrió en Barcelona y en Puerto Píritu la semana pasada es simplemente la reacción de un pueblo que tiene hambre” destaca Michelangeli.
Expresa que la MUD no tomará medidas en contra del mandatario regional. Contrario a impulsar actos de violencia, la bancada de la oposición en el Parlamento Nacional, impulsa diversas opciones para salir de la crisis, una de ellas el referendo revocatorio. Por otro lado, aprueban la celebración de un diálogo entre el gobierno y la oposición para tratar temas de interés para el país.
“Creemos en el diálogo, pero en el diálogo sincero, no aquel donde el Presidente de la República pide conversar con el Presidente de la Asamblea y luego lo llama delincuente en cadena nacional”.