El decreto no presenta ninguna viabilidad a juicio del sector sindical que insta al estado a llamar a nuevos empleados para generar una mayor producción
Como el “regreso de la esclavitud” sentencia la diligencia sindical el decreto 9855, publicado en la Gaceta Oficial 40950 del pasado 22 de julio y que ordena a las empresas facilitar trabajadores para que asistan al sector agroalimentario por un lapso de 60 días.
“Es un exabrupto, no tiene sentido ese decreto que por 60 días diversos empleados vayan a producir a una empresa, abandonando la estabilidad que tienen para trabajarle al estado, el cual es bien conocido que no paga” destaca Tito Barrero, presidente de Fetranazoátegui.
Por otro lado, el dirigente de la central obrera anzoatiguense manifiesta que en vez de solicitar el apoyo a diversas empresas, el estado debe convertirse en el principal empleador de la industria que garantizará el alimento para el país.
“¿Qué pasó con los trabajadores de las empresas que el gobierno expropió? El estado tiene la obligación de capacitar a un personal para que trabaje por tiempo indefinido en las empresas de alimentos y así evitar que después de 60 días se paralicen nuevamente” agrega el dirigente.
Panorama distinto
La dirigencia sindical anzoatiguense sentencia que con el decreto se evidencia que la visión del actual gobierno no está en la misma sintonía del resto del país. Esta es la principal razón por la cual las medidas tomadas no han sido efectivas para superar la crisis que se vive en los actuales momentos.
“Rechazamos las pretensiones del actual gobierno de esclavizar a la clase trabajadora del país a través del decreto. Esta son recetas aplicadas a los trabajadores cubanos, una medida así en Venezuela lo que traería es una mayor depresión en los hogares venezolanos” Destaca Wolfang Guevara, dirigente sindical del partido Acción Democrática.
Asimismo se cuestiona el hecho que a pesar de la crisis, el gobierno de Nicolás Maduro continúa con planes que generan un mayor déficit presupuestario y no le permiten al sector productivo reactivarse para beneficiar a la población.
“Reclamamos un cambio en las políticas socio-económicas. En vez de llamar a los trabajadores de las empresas se deben poner a producir a los privados de libertad y las tierras que han sido expropiadas. Aquí se siguen manteniendo a un grupo de tarifados armados que atentan contra las familias venezolanas” sentencia Guevara.
Finalmente manifiestan que si de verdad el gobierno desea activar plenamente el sector agroalimentario debe iniciar por mejorar la vialidad agrícola, uno de los factores que ha obligado a los productores a abandonar las labores del campo.