En Guayana, hay quienes mantienen viva la emoción por ver jugar en el estadio a la selección venezolana de fútbol, la Vinotinto, muy a pesar de los gastos que impliquen. Otros, por razones económicas o de tiempo, terminan por ver el partido desde sus hogares o algún lugar público, como un centro comercial.
Este martes la Vinotinto se enfrentó a la selección de Ecuador, para lo cual los vendedores informales ya estaban preparados para la venta de franelas, gorras y banderas.
La franela original de la Vinotinto tiene un costo de entre Bs. 25.000 y 28.000, mientras que en los “buhoneros” estas no bajan de los Bs. 5.000. El precio de las entradas varían según su ubicación; la más económica tenía un costo de Bs. 800 (tribuna superior B y C), mientras que la más costosa era de Bs. 36.000 (palcos de 24 puestos).
El consumo implica otro gasto. Refrescos en Bs. 160, agua en Bs. 40, gatorade a Bs. 250 y malta a Bs. 80. El precio de las comidas y chucherías no bajaban de los Bs. 300. En total, el consumo promedio es de al menos Bs. 1.500 por persona, contando con las entradas más baratas; incluyendo franelas de imitación el monto se incrementa a unos Bs. 7.000 u 8.000 por persona, sin incluir gastos de comida.
“Entre mi novia y yo gastamos entre tres mil y cuatro mil bolívares entre entradas y bebidas, no compramos franelas sino que usamos las viejas, tampoco comimos en el estadio”, reveló Jorge González, fanático de la Vinotinto.