La crisis en salud que se vive en Venezuela tiene en alerta a toda la población, pues el problema de la dotación de medicamentos está alcanzando a las embarazadas, ya que estas no reciben multivitamínicos, sulfato ferroso, ácido fólico e incluso hasta el pote de leche que antes se les otorgaba para garantizar la alimentación de los pequeños.
De acuerdo a Dianela Parra, presidenta del Colegio de Médicos del estado Zulia (COMEZU) debido a las crisis en salud las embarazadas no están recibiendo el tratamiento adecuado para traer al mundo a sus hijos, lo que apuntalará más la desnutrición infantil en la entidad zuliana. Manifiesta que al problema se suma la crisis económica y la escasez de alimentos ya que las madres no pueden cumplir con la dieta adecuada propia de un embarazo.
“Si seguimos por este camino Venezuela va a ser un país de desnutridos y de deficientes en el área intelectual”
La crisis en salud se ve en los hospitales y ambulatorios del país
La presidenta del Colegio de Médicos del Zulia denuncia además las precarias condiciones en las cuales trabajan los profesionales de la salud en el Zulia, que catapulta la crisis en salud, producto de las fallas eléctricas, racionamiento de agua y falta de insumos médicos.
“Se está compitiendo contra la vida, los pacientes que no consiguen sus medicamentos están condenados a la muerte”
“Los centros asistenciales presentan graves fallas de infraestructura, de instalaciones sanitarias aunado a la carencia de equipos tan importantes como: tensiómetros, baja lenguas, lámparas, equipos de ORL, electrocardiógrafos, equipos de rayos X y hasta ascensores, equipos que son indispensables para poder atender todos los casos de emergencia”, sentencia Parra.
Pide a todo el gremio galeno el apoyo unánime a la Ley de atención de la Crisis Humanitaria en Salud, por lo que insta a constituir comisiones de médicos que presten su colaboración para aportar soluciones y mantenerse sigilosos en el funcionamiento de los centros hospitalarios, además exhorta a las autoridades a intensificar los controles de seguridad sanitarios para evitar la venta ilícita de medicamentos a las afueras de los hospitales del país.