Trabajadores de Corpoelec Aragua exigen militarización de Subestaciones pero la gerencia y el ministro hacen caso omiso.
Trabajadores de Corpoelec Aragua
no son perdonados por el hampa, debido a que hasta en su sitio de trabajo están expuestos a la arremetida de antisociales y a pesar de que exigen la militarización de subestaciones, no hay respuesta de las autoridades ni del ministro de Energía Eléctrica.
Juan González, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria Eléctrica en Aragua (Sintiea), relató que justo en su guardia del 25 de diciembre, un operador de la subestación San Vicente, al suroeste de Maracay, fue atacado por varios sujetos armados con machetes y armas de fuego.
“Al trabajador de Corpoelec le dieron un machetazo en la espalda, le cayeron a patadas. Le pusieron la cabeza en un escritorio mientras varios delincuentes le decían a otro que le cortara la cabeza con el arma blanca. Fue una agresión física y psicológica”.
Hasta ahora o hay respuesta de las autoridades de Corpoelec sobre la arremetida delictiva ni de las pertenencias que le robaron al trabajador.
Trabajadores de Corpoelec Aragua exigen militarización de subestaciones sin milicianos
El dirigente sindical señaló que la intención de los sujetos era llevarse computadoras y aires acondicionados del lugar. De haberse concretado el robo a la Subestación de transmisión San Vicente, González aseguró que toda la zona industrial homónima como varias áreas aledañas -incluyendo parte del centro de Maracay- hubiese quedado sin servicio eléctrico por varias horas.
Según el secretario general del Sintiea, en diciembre también se registró un ataque a trabajadores en una subestación de Falcón y hace dos meses en la Subestación Soco de La Victoria.
“La acción de delincuentes se está llevando a cabo en todo el país, exigimos la militarización de las subestaciones pero no con milicianos. Estamos acéfalos, en total inseguridad, vivimos una situación caótica en los centros de trabajo, porque no tenemos aire acondicionado, agua potable, ni sillas donde sentarnos cuando se hacen guardias hasta de 24 horas”.
Generencia de Corpoelec y ministro: oídos sordos
Según González la directiva de Corpoelec Aragua ni el ministro de Energía, Luis Motta Domínguez, prestan atención a las exigencias de los trabajadores para poder garantizar servicio al pueblo.
“Somos demasiado pasivos en el sector eléctrico porque la inseguridad nos tiene azotados. Desde el antes del 6D nos mandaron a redoblar las horas de trabajo y ni siquiera nos han cancelado las horas extras”.
En Aragua son 1.500 trabajadores en iguales circunstancias, pero en el país son 37 mil los hombres y mujeres expuestos a pésimas condiciones laborales y sin beneficios, como medicina y atención médica. El seguro de los trabajadores solo les cubre 150 mil bolívares, que González asegura que no alcanza ni para un tratamiento de uña encajada.
Lo peor de la circunstancia que relata el dirigente sindical, es que a pesar de las denuncias, a los trabajadores se les tilda de escuálidos y saboteadores.
“La gerencia de Corpoelec cree que administra una bodega o un cuartel. Quieren tirarnos al Sebin como si uno es un delincuente por decir la verdad. No tenemos insumos necesarios para garantizar el suministro eléctrico, pero hay una falla y nos buscan con los cuerpos policiales”.
González insistió en que los equipos triplicaron su tiempo de vida útil, tienen más de 40 años y no se garantiza el mantenimiento.