Luisa Pernalete, coordinadora de Fe y Alegría, declaró que ese movimiento no está ajeno a la situación país y los retos se multiplican para las instituciones.
La coordinadora de Fe y Alegría, Luisa Pernalete, apuntó que ese movimiento de educación integral, tiene presencia desde la Guajira hasta en el pueblo más recóndito de la frontera con Brasil. No obstante apuntó que la grave crisis económica del país, ha afectado en los últimos años, tanto a la institución como a los padres de los niños que allí estudian. Mencionó que en los últimos dos años, las maestras detectaron un gran número de inasistencias que antes no era normal y se debe a un problema de alimentación muy severo en los hogares de los niños.
Enfatizó que al realizar las estadísticas consolidadas, registraron casi 2 mil alumnos menos en comparación con el año anterior, por razones variadas, pero la mayoría es por asuntos económicos y alimenticios. También hay casos de padres extranjeros, que tuvieron a sus hijos en Venezuela y se han devuelto a Colombia y Guayana, comentó la coordinadora de Fe y Alegría.
Se presentan situaciones en que los estudiantes de bachillerato se retiran para trabajar y por eso han ideado un plan de centros de capacitación laboral, dirigida a jóvenes entre 14 y 25 años, para nutrirse como persona y adquirir un oficio en cursos cortos.
Pernalete dijo que no todos los colegios cuentan con el Programa de Alimentación Escolar (PAE) y en Valencia, estado Carabobo, arrancaron con el plan Ollas Solidarias Escolares, con el que se completan los alimentos que envía el PAE y lo que cualquier persona quiere donar.
«Hay muchos alumnos que comen en su casa, entonces, permitan que los que no, lo puedan hacer y puedan sostenerse», recomendó Pernalete.
Cualquier persona interesada en realizar un aporte puede dirigirse a cualquiera de estos centros y hacer su aporte. Esta organización ofrece educación a más de 140 mil estudiantes y cuenta con un personal de 254 mil trabajadores. Pernalete puntualizó que parte del trabajo de Fe y Alegría, que arriba a sus 62 años de servicio, es hacer visible tanto los dramas como las luces que vamos encontrando en este país.