Consejo comunal derribó una pared que pertenece a una propiedad privada, en la que se construían habitaciones individuales.
El hecho ocurrió en el sector “Rancherío 2” en la parroquia Cristo de Aranza al noroeste de la ciudad de Maracaibo. Rafael Sanabria, dueño del espacio en el que se extendía la pared, aseguró que el consejo comunal derribó el muro con el argumento de que esos terrenos pertenecen al gobierno regional, a pesar que aseveró tener la nomenclatura en regla.
Precisó que desde años atrás el consejo comunal le tiene declarada la guerra por ser opositor al gobierno nacional, indicó que la acción es ilegal y que deben respetar sus derechos como habitante de la zona y al de la propiedad privada.
“Ellos pretenden sacarme de aquí porque tienen un proyecto de construcción de casas…, de la noche a la mañana todos se organizaron y me tumbaron la pared, por qué si yo tengo los papeles en regla”.
Sanabria expresó que tras el hecho se presentó ante a intendencia parroquial pero que al intentar introducir la denuncia no fue atendido porque ya el consejo comunal había presentado una lista con 500 firmas de personas solicitando que le fueran expropiados los terrenos.
“En la intendencia como son los mismos chavistas lo que hicieron fue beneficiarlos a ellos”.
Pidió a ese despacho emitir una orden para que le fuese restituida la construcción derribada pero que como respuesta sólo recibió que él mismo la volviera a edificar.
Manifestó que la medida del muro es de aproximadamente 15 metros de largo y que reponer los elementos de su propio bolsillo le sería imposible dada la escasez de materiales de construcción, además de los altos costos en las ferreterías, confesó que la zona es ampliamente conocida porque allí operan bandas delictivas, por lo que teme por su seguridad y la de su familia, pues con el derrumbamiento quedó a la intemperie.
“Un saco de cemento cuesta Bs. 1.200 no tengo con que comprarlo y además son ellos los que tienen que construirlo”.
“Aquí manda el consejo comunal”
Después de la acción la pelea por el poder entre los vecinos se intensifica pues Yajaria Inciarte, líder del consejo comunal, asegura que los terrenos le pertenecen a quien los necesite:
“Él debió consultarle al pueblo y la gente que necesita casa, nosotros como consejo comunal tomamos la batuta para darle el terreno a la gente”.
Inciarte aseguró que a pesar de las críticas vecinales y las diferencias políticas permanecerá sigilosa para que los espacios no sean vendidos a desconocidos y se direccionen a lo que el consejo comunal que representa destinó para los mismos “Aquí hay un proyecto de Barrio nuevo barrio tricolor y se debe respetar las leyes y la defensa territorial que da nuestro gobierno, no le voy a permitir a él que haga nada”.