Comer frutas en Venezuela se convirtió en un lujo porque compradores invierten hasta 4 mil bolívares al mes, poco menos de la mitad de un sueldo mínimo.
Mantener una dieta con consumo de frutas diario en Venezuela se convirtió en un lujo, porque cada día aumentan los precios y se escapan de los bolsillos que devengan un salario mínimo.
Las ventas de frutas nacionales ha mermado, pues los compradores ahora adquieren la mitad de lo que acostumbraban a llevarse normalmente.
“Las ventas de frutas han bajado paulatinamente desde que agarró el gobierno Chávez, desde ese momento para acá se vino todo abajo”, comentó Manuel Goncalves quien desde hace 20 años expende frutas en uno de los mercados populares de Maracay.
En su análisis, el comerciante aseguró que debe ingeniárselas para “atraer y enamorar al cliente”, de manera que sonríe y asegura que debe tratarlos mejor y darles de probar las frutas para poder vender.
“Como dicen coloquialmente, tengo que echarles una jaladita a los clientes para que compren, yo antes no hacía eso”.
Al precio de las frutas se suma el costo de las bolsas plásticas que según Goncalves, se convirtió en una locura.
En su última adquisición, debió pagar Bs. 1730 por un paquete de 50 bolsas negras, a lo que se suman las bolsas plásticas pequeñas, en total, invirtió 5 mi bolívares en las bolsas obligadas porque es imposible que la clientela se lleve la mercancía en las manos.
El tema de las frutas importadas es otro. El comerciante indicó que hasta diciembre de 2014 vendió manzanas, peras, ciruelas, kiwi, albaricoque y uva importadas. Ahora es imposible comprarla por los altos costos y la poca salida.
“Ahora se tiene que vender pura fruta nacional, aquí el único importado soy yo. Las ventas han caído en un 70 por ciento».
Antes yo compraba una paleta de uvas importada que traía 650 kilos para venderlos 24 y 31 de diciembre. En diciembre de 2015 compré cinco cajas de 8 kilos cada una y me sobró”.
Ahora hay que rendir las frutas
Luz Contreras junto a su esposo compraban las frutas de la semana. Señaló que debe invertir poco más de mil bolívares para poder cumplir con la ingesta de jugos naturales que disminuyó de forma diaria a solo tres tomas a la semana.
“Una lechosa ya está por el orden de los 700 bolívares, más un melón y una piña, sale en poco más de mil bolívares. Antes comíamos más frutas ahora hay que comprar lo más barato y rendirlas porque por ejemplo, un kilo de cambur ya está en 250 bolívares y en mi casa donde somos cuatro, un kilo de cambur nos dura un día”. Añadió que por lo general, para complementar la semana, finalmente compran naranjas.