Las colas en Venezuela siguen incrementándose a pesar de los intentos fallidos del gobierno nacional en vender alimentos con los CLAP.
Como si estuviesen presos del hambre, así se encuentran los zulianos quienes pasan horas haciendo las largas colas en Venezuela debido a la intensa escasez de alimentos.
El gobierno continúa tratando de ocultar esta realidad negando la crisis humanitaria que atraviesa Venezuela, mientras los anaqueles de los supermercados cada día están más vacíos, un número considerable de niños se encuentran desnutridos por falta de alimentos y muchos otros comen de la basura,
En una de las tantas colas en Venezuela se encuentra Roxana Castellanos, una habitante de Maracaibo quien asegura que ya está a acostumbrada a pararse frente a un supermercado simplemente a esperar lo que llegue.
“Ya son cinco años haciendo en esto, los días se le van a uno haciendo colas, del trabajo para el supermercado…, ya aquí somos hasta familia, pero familia del hambre, presos del hambre”, sentencia Castellanos.
Esta mujer precisa que, durante los últimos meses come sólo dos veces al día, ya que casi siempre los productos que llegan son de higiene personal o limpieza, y no lo que tanto anhelan.
“Desde espagueti solo y hasta arroz sin nada de nada, se come lo que se consiga, a veces llega y no alcanza para todos los que estamos en la cola y toca regresarse sin nada…, ahí es cuando el hambre pega más, porque me ha tocado acostarme y levantarme sin nada en el estómago y yo sé que mucha gente está así”, manifiesta Castellanos.
Critica que la frontera colombo-venezolano en el Zulia no la abran como ha ocurrido en Táchira, para permitir que los ciudadanos vayan a comprar alimentos para subsistir.
“Aquí el poder vale más que el hambre, por la frontera está pasa que pasa comida colombiana pero cara, no puedo comprar de esa sino de la regulada porque no hay cobres y lo que hay no alcanza”, exclama Castellanos.