Luchadores sociales advierten que existen todos los ingredientes del cóctel para que se produzca un estallido social en la capital del país.
Las últimas semanas para los venezolanos se han convertido en una agonía donde hasta el conseguir un pedazo de pan es casi imposible por la escasez de harina de trigo, todo esto aunado a la crisis financiera desatada con el retiro del billete de Bs 100 lo cual creo un gran caos a nivel nacional. Luchadores sociales afirmaron que en el municipio Libertador están todos los ingredientes del cóctel para que se produzca un estallido social a consecuencia de la pésimas política económicas del Gobierno y el cerrar cualquier salida electoral a la crisis.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, explicó al recorrer las calles de la capital se puede observar el malestar y la rabia del pueblo ante esta grave crisis económica que ha convertido el salario en sal y agua.
“La hiperinflación nos dejó casi que haciendo magia para comer, aunado a la escasez provocada por un Gobierno ineficiente que logró robarle a los venezolanos su tradicional cena navideña”, indicó.
Rojas señaló que al parecer el Gobierno de Nicolás Maduro con sus políticas descabelladas está provocando un estallido social que nadie quiere en Venezuela, decisiones como el retiro del billete de Bs. 100 para luego recular ante la presión popular o impedir a la Polar vender la Harina Pan al módico precio Bs. 770 para seguir importándola y venderla por encima de los 4 mil.
“Sentimos rabia y desesperación cuando ni una arepa nos podemos comer por culpa unos tipos que para mantener su guiso de importaciones poniendo al país a pasar hambre. Estos son ingredientes claros que pueden desatar un estallido social en cualquier momento”.
Destacó que nadie quiere una salida sangrienta como lo es un estallido social, la cual podría costarles la vida a muchos venezolanos dadas las políticas represivas de Nicolás Maduro, siendo la única forma de evitarlo el convocar a elecciones generales. “Lo ocurrido en Ciudad Bolívar y Maracaibo donde hubo saqueos y protestas contundentes son solo la punta del iceberg de un suceso que puede llegar a la ciudad de Caracas, teniendo en cuenta que hasta no podemos desayunar y cenar porque ni pan hay. Hay que parar esto porque el desenlace será fatal y lleno de sangre”, afirmó.
La inseguridad también será un ingrediente que puede provocar el estallido
Por su parte Jorge camperos, dirigente comunitario de la parroquia Altagracia, relató que ni los alrededores del Palacio de Miraflores son seguros, ya que este sábado en horas de la noche entre las esquinas de Paraíso a Dr. González se escucharon fuertes ráfagas de disparos dejando como saldo una persona asesinada justo detrás de la oficina de Nicolás Maduro. “Además de bajar más de 20 kilos por la falta de comida, ahora ni podemos salir de nuestras casas porque el hampa esta desatada y en muchos casos protegidos bajo un carnet de colectivos, el pueblo está molesto y con una rabia contenida que ´puede explotar en cualquier momento. O nos matan de hambre o un malandro en cualquier esquina”.
Josman Guevara, dirigente social de Catia, expresó que un reflejo del descontento tan grande es que sectores populares como Los Frailes, Gramoven o Alta Vista adversan al Gobierno de Maduro de forma clara y contundente cuando en el pasado eran tradicionalmente chavistas. “La gente más humilde está casi que muriendo de hambre y han tenido que comer de la basura, ellos han abierto los ojos y al no haber una esperanza de elecciones podrían caer en la desesperación y lanzarse a la calle a una protesta fratricida”, concluyó.