La crisis económica es cada día más visible en los anaqueles de los supermercados venezolanos. La escasez ha aumentado en las últimas semanas y la gente recorre cientos de kilómetros buscando dónde comprar carne en Caracas.
Un carnicero en un automercado de la capital cuenta que ya tiene dos semanas sin que llegue la carne.La nevera ya tiene tres días exhibiendo el cartel de «no hay» y los encargados no saben cuándo cambiará la imagen.
«Los vendedores dicen que no van a traer para perder como quiere el Gobierno».
Aunque los compradores se ven severamente afectados, indican que la culpa no es de los vendedores, sino de los controles. Un señor recorrió tres supermercados y dos mercados municipales en los últimos cinco días buscando dónde comprar carne en Caracas y no ha logrado conseguir el alimento para su familia. Dice que cada vez que el Gobierno anuncia un nuevo «bajón» de precios la escasez empeora.
«Desde que bajaron los huevos ya no se consigue ni un cartón y ahora la carne. Antes uno encontraba alguito; caro, pero había. Ahora ni caro ni barato».
La situación se repite también con el pollo. Adquirir proteínas de origen animal se ha convertido en todo un reto para los venezolanos. «Ya yo no sé cómo vamos a hacer, qué vamos a comer. Cada cosa que se inventa el Gobierno para tratar de poner pañitos calientes lo que logra es empeorar e incrementar la escasez de todo», afirma María Guevara, un ama de casa que pasa casi la mitad de la semana buscando comida en distintos establecimientos de la ciudad para intentar llenar la nevera de su casa.