Tras sostener un encuentro, el partido Alianza Bravo Pueblo manifiesta la importancia de los observadores internacionales durante la marcha.
La agrupación política Alianza Bravo Pueblo (ABP) como integrante de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), solicitará en las próximas horas a organismos mundiales como la Organización de Estados Americanos (OEA) Organización de Naciones Unidas (ONU), Comunidad Europea, embajadas acreditadas en el país y ONG’s de derechos humanos, la presencia de observadores internacionales durante la marcha del próximo 1ro de septiembre denominada La Gran Toma de Caracas.
“La ciudad de Caracas ha sido militarizada así como también sus accesos. Es un secreto a voces que el gobierno intentará sabotear la llegada del pueblo a la capital del país sabiendo que será la mayor concentración de ciudadanos jamás vista en Venezuela” señala Francisco Abad, dirigente del partido Alianza Bravo Pueblo en el estado Anzoátegui.
Asimismo, la organización a la que pertenece Antonio Ledezma, insta a los posibles observadores internacionales a estar atentos a la actuación provocadora del gobierno ese 1ro de septiembre. En ese sentido manifiesta su rechazo a las actividades que pretende realizar el oficialismo tanto en la ciudad de Caracas como en el resto del país.
“Es una provocación del gobierno realizar una convocatoria a una actividad oficialista ese día. Quieren ocultar el rechazo que le tiene un pueblo que ya habló el pasado 6 de diciembre” sentencia el Secretario General de la tolda Vinotinto.
Exigen fecha
Abad y el resto de la dirigencia abepista, acusa a Nicolás Maduro de estar violando la Constitución al no permitir la ejecución del artículo 72. Refiere que la MUD, ya cumplió con el 1% exigido para la validación de las firmas.
“No se justifica que las rectoras del Consejo Nacional Electoral aún no hayan convocado a los 4 millones de venezolanos a que realicen su manifestación de voluntad para llamar a la consulta refrendaría que el país está exigiendo ante la grave crisis que padece” explica el dirigente.
Destaca Abad, que más del 80% de los venezolanos está convencido de que la salida a la actual crisis que vive el país pasa por un proceso democrático. Dentro de la sociedad civil ni en la oposición se quieren escenarios de violencia y por ello se agotan todas las posibilidades dentro del marco democrático.
“El CNE está violentando tanto la constitución como su propio reglamento al colocar trabas al proceso revocatorio. Las rectoras están impidiendo que el referendo se realice este año como lo desea la mayoría de los venezolanos” manifiesta el vocero de la organización.